Desesperado SOS de Rafa Guijosa
Rafa Guijosa (Alcalá de Henares, 1969), actual seleccionador nacional de balonmano de Irán y exentrenador del Abanca Ademar León, se encuentra atrapado en Teherán debido a la grave escalada bélica que afecta al país.
Incomunicado por la falta de acceso a redes sociales y servicios de mensajería como WhatsApp, el técnico español ha conseguido enviar un correo electrónico a medios de comunicación y amigos solicitando ayuda y visibilidad para su situación.
En un mensaje dirigido al programa El Partidazo de Cope, Guijosa transmite su preocupación: “Hoy ha sido una tarde muy dura y se oyen constantemente bombas. Esto cada vez va a peor. Solo tengo acceso al email para contactar con mi familia. Estoy prácticamente incomunicado”.
Petición a las autoridades españolas y deportivas
Ante el agravamiento del conflicto, el que fuera jugador del FC Barcelona entre 1994 y 2002, ha pedido ayuda urgente al Gobierno de España, al Consejo Superior de Deportes, a la Real Federación Española de Balonmano y al propio club azulgrana, esperando que cualquiera de estas vías pueda facilitar su salida del país.
La única alternativa viable que valora actualmente es una ruta terrestre de 1.300 kilómetros hacia la frontera con Turquía, aunque la peligrosidad de los desplazamientos en esa zona hace que no se contemple como una opción segura. También ha considerado la salida por vía marítima hacia Dubái o Catar, pero ha calificado esa posibilidad como “un suicidio”.
Un referente del balonmano español en una situación límite
Guijosa, campeón del mundo con la selección española y dos veces medallista olímpico, fue entrenador del Ademar León desde 2015 hasta 2019, y es considerado uno de los grandes nombres en la historia del club leonés. Tras su etapa en España, aceptó la oferta para dirigir a la selección iraní, un proyecto deportivo que ahora queda en suspenso ante el deterioro de la seguridad en el país.
El seleccionador insiste en que no busca crear alarma, sino simplemente visibilizar su situación con la esperanza de que la ayuda institucional llegue cuanto antes: “Necesito que se sepa de mi situación. Ayúdame comentándolo a todo el que puedas. A ver si me sacan de aquí a través de la embajada, la Federación de Irán, Turquía, Española, la IHF, el Barça... lo que sea”, ha escrito en una carta dirigida a sus amistades.
Silencio informativo y falta de vías de escape
La situación que vive Guijosa refleja una realidad que afecta a muchos extranjeros actualmente en Irán, con escasas vías de información y graves restricciones en las comunicaciones. Según ha explicado, la desinformación es total: “Nadie sabe qué va a pasar. No tengo acceso a redes ni canales oficiales. Todo es incertidumbre”.
Desde el entorno del técnico se insiste en la necesidad de que el Ministerio de Asuntos Exteriores de España y el cuerpo diplomático actúen con urgencia para facilitar una salida segura. Mientras tanto, Guijosa continúa en Teherán, a la espera de que alguna de las puertas que ha tocado se abra antes de que la situación se deteriore aún más.