La Atención Primaria en la Comunidad mantiene una demora media de 1,9 días pese a las dificultades de personal
Las bolsas de médicos siguen vacías pero la atención en los pueblos este verano aún no ha obligado a trasladar pacientes
La demora media para conseguir cita en Atención Primaria en Castilla y León se sitúa en una media de 1,9 días, según los datos actualizados por la Consejería de Sanidad, una cifra que se mantiene dentro de los parámetros “aceptables” a pesar de la presión asistencial del verano, la escasez de sustituciones y la falta de profesionales disponibles en las bolsas de empleo.
Durante su intervención en ‘Los desayunos de Ical’, el consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, reconoció que el sistema atraviesa “momentos complicados”, que se agudizan durante el verano, cuando se incrementa notablemente la población en los pueblos y, por tanto, la demanda de atención. Aun así, subrayó que el objetivo de garantizar una demora máxima de 48 horas se cumple “con carácter general” en la mayoría de los centros.Esto no implica que no existan tensiones, en especial en centros urbanos con más presión y en zonas donde la falta de sustituciones obliga a reorganizar la asistencia con acumulaciones o consultas de rebosamiento”, explicó.
Ante la falta de profesionales en las bolsas de empleo -que, en palabras del consejero, están actualmente “vacías”-, la Consejería de Sanidad ha optado por reorganizar los recursos humanos disponibles, y en este verano la atención se está garantizando mediante acumulaciones de agenda, consultas de rebosamiento y, en casos extremos, se podría recurrir al traslado a la demanda asistencial al centro de salud más próximo, si fuera necesario como ha ocurrido otros veranos.
“Por ahora no hemos tenido que recurrir al desplazamiento de pacientes, o al menos no se me ha comunicado”, explicó, para precisar que se está manejando la situación con los recursos disponibles en cada centro.El consejero recordó que Castilla y León es una comunidad con la mayor proporción de médicos de Atención Primaria por habitante del país, lo que permite una cierta “capacidad de maniobra” para cubrir eventualidades como bajas, vacaciones o picos de actividad. Aun así, reconoció que la situación no permite “autocomplacencias” y que siguen trabajando en fórmulas como el autoconcierto, que llegó para quedarse, para reducir aún más las demoras.
Cifras “prepandemia”
Por lo que respecta a la lista de espera quirúrgica, que aspira a llevarla a cifras “prepandemia”, destacó que a 30 de junio refleja una reducción del 57,5 por ciento en la demora media para operarse respecto al inicio de legislatura. La espera media estructural para acceder a una intervención en los hospitales públicos se sitúa en 80 días, frente a los 139 días registrados en marzo de 2022. El número total de pacientes ha bajado de 42.574 a 25.107 desde entonces, lo que supone una reducción de 17.467 personas.
Por especialidades, las más saturadas siguen siendo traumatología (8.319 pacientes), cirugía general y digestiva (4.243) y oftalmología (4.044), que juntas acumulan el 66 % de las esperas. En cuanto a diagnósticos, destacan las cataratas (3.075), la artrosis de rodilla (1.502), la hernia inguinal (1.133) y la artrosis de cadera (987).
Por prioridad clínica, 937 pacientes requieren cirugía antes de 30 días, con una demora media de solo 10 días en ese grupo. En el nivel intermedio (90 días), hay 3.915 personas, con una espera media de 69 días, y en el grupo con menor prioridad (hasta 180 días) se concentran 20.255 pacientes, con una demora media de 86 días.En cuanto a consultas externas y pruebas diagnósticas, la espera media para una primera consulta hospitalaria es de 88 días, con un total de 175.068 pacientes en lista. En pruebas, las más demoradas son las resonancias (98 días de media) y las ecografías (91 días), mientras que las mamografías tienen una espera de 44 días.