Castilla y León inicia el camino para declarar el toque de campana Bien de Interés Cultural
El Grupo Parlamentario VOX en las Cortes de Castilla y León ha conseguido este 9 de mayo que la Comisión de Cultura, Turismo y Deporte apruebe una Proposición No de Ley (PNL) para que el toque de campana sea declarado Bien Inmaterial de Interés Cultural en Castilla y León. La iniciativa ha contado con el apoyo del PP, UPL-Soria YA y el Grupo Mixto, mientras que el PSOE se abstuvo.
La propuesta también insta al Gobierno de España a que inicie los trámites necesarios para su reconocimiento como Manifestación Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial en todo el territorio nacional, en aplicación de la Ley 10/2015 para la salvaguardia de este tipo de patrimonio.
Un sonido que vertebra la historia y la identidad de los pueblos
El procurador de VOX, Miguel Suárez Arca, defendió la moción subrayando que “se está produciendo una persecución silenciosa hacia el toque de campana, como si fuera ruido, cuando en realidad es un sonido que ha vertebrado la sociedad española a lo largo de la historia”.
En su intervención, recordó que el uso de campanas se remonta a la época romana y que, desde la Edad Media, ha estado vinculado tanto a la vida religiosa como a la civil, siendo el campanario un símbolo comunal. “Es un legado histórico que se ha sabido mantener en el tiempo”, afirmó.
Comunicación, emoción y memoria colectiva
El toque de campanas ha sido históricamente un sistema de comunicación esencial en pueblos y ciudades, marcando ritmos sociales, religiosos y emocionales. “Alegría, tristeza, llamada o acción: el lenguaje sonoro de las campanas despierta sentimientos colectivos”, señaló Suárez Arca, quien subrayó que su protección debe ser asumida “con seriedad institucional y desde las Administraciones Públicas”.
Un respaldo institucional que se suma a la protección internacional
La defensa de esta tradición no es nueva. En 2019, el toque manual de campanas fue declarado por el Gobierno de España como Manifestación Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial. Y en noviembre de 2022, la UNESCO lo reconoció como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, valorando su papel como un código sonoro transmitido de generación en generación.
La iniciativa aprobada ahora por las Cortes de Castilla y León representa, según VOX, un paso más hacia una protección integral de esta expresión identitaria que, como concluyó Suárez Arca, “resiste hoy gracias al empeño de muchos, pero necesita también el respaldo de las instituciones para perdurar mañana”.