Addoor Sticky
CRÓNICA

Laura Sam y Derek V. Bulcke, entre la locura y la cordura en Cerezales

Laura Sam y Derek V. Bulcke, entre la locura y la cordura en Cerezales. Foto: Jesús Ferrero

Los ritmos pegadizos y electrónicos triunfan en el primero de los conciertos programados en la Fundación Cerezales Antonino y Cinia para el ciclo Tropos 2025.

Laura Sam es conocida como rapera, pero desde luego es una poeta potente, de discurso afilado y temática profunda. En el escenario su presencia impone por su lenguaje gestual, muy físico y acorde con el mensaje que refleja. Murciana trasplantada al País Vasco, es referencia por ser fundadora de “Spoken Word Bilbao”, un encuentro de poesía oral. Formada en Bellas Artes, comenzó su carrera como artista plástica, pero pronto tomó los derroteros de la “performance”. No ha renunciado a sus raíces y últimamente (2021) se hizo más conocida aún al viralizarse un video suyo declamando un “spoken word” con acento murciano.

Participa con asiduidad en festivales internacionales y ha efectuado colaboraciones con el rapero Kase. O y el cantante de León Benavente, Abraham Boba (de pila David Cobas) Ha editado dos poemarios: Incendiaria y Géiser. Curioso el formato de esos poemas, sin comas, para reproducir el ritmo del “spoken word”.

Derek Van Den Bulcke es más conocido como DJ y productor, aunque de formación también es licenciado en Bellas Artes. Ha cursado estudios en Murcia, Bilbao, Sao Paulo y Nueva York, aunque actualmente reside en Granada. Allí se unió al colectivo “El Rapto”, un estudio que funciona desde 2014 en varios ámbitos, desde el diseño de camisetas y diverso “merchandising” e imagen para grupos musicales, hasta la producción editorial. Es asiduo asistente a festivales nacionales e internacionales.

La salud mental sobre el escenario

En este concierto de Cerezales, último del dúo este verano, se han paseado por la delgada línea que media entre la locura y la cordura, por ese rincón, tantas veces olvidado, que es la salud mental. Con temas como “Aullido” o “Querer dejar de ser” demuestran claramente cómo los seres humanos, particularmente las mujeres, son víctimas de circunstancias que las obligan a no ser lo que querrían o a ocuparse de lo que no les interesa. Servidumbres del reparto de roles, combatidas a base de ansiolíticos, postureo en redes sociales y hasta el mismo suicidio.

No queda aparte tampoco en estos tiempos de etiquetas el asunto del patriotismo, de qué hacer para ser “buena española”, tan difícil cumplir en todos los aspectos que hastía. Tampoco se olvidan de los malos tratos en “Me estás matando, pero te quiero”, donde se analiza la relación de dependencia de la mujer con respecto al hombre y al ya mencionado reparto de roles.

Abraham Boba (León-Benavente), presente

Sorpresa nos llevamos cuando suena en virtual dúo la voz de Laura junto a la de Abraham Boba de León Benavente en “Tampoco puede ser eterno”, donde se habla de lo fugaz de lo bueno, que es la misma vida. Lo falso de las redes sociales y la falta de atención sobre temas importantes y trascendentes quedan reflejados en “Scroll”, vertiginosa pieza interpretada a oscuras, con la sola luz del teléfono móvil de Laura.

Termina el concierto con dos piezas más tranquilas. “Agurra”, saludo y despedida en euskera, y otra sobre versos de Antonio Ferres, poeta del realismo social.

Ritmo pegadizo y electrónico

Y no son sólo las letras. Las máquinas de Derek nos transportan con un ritmo pegadizo y electrónico, pero no electrificado. Hasta una “txalaparta” y un arpa de boca suenan en “Agurra”. Perfecto el equilibrio entre tecnología y sonido tradicional.

En la despedida, Laura, agradecida, nos recomienda ser muy valientes ahora y siempre. Se agradece el consejo en estos tiempos de duda permanente, como también se agradece la valiente apuesta de la Fundación cerezales Antonino y Cinia. Lo que ofrecen no es para mayorías, pero es Arte, y con mayúsculas.