La Cultural cae, pierde su ventaja y se enfrenta a la épica de tres grandes finales
La Cultural pierde su "final" y cae ante el Ourense. El equipo de Llona, víctima de un nuevo error en el primer arreón del encuentro, se queda a dos puntos de la Ponferradina a tres jornadas para el final de la temporada. Barakaldo, Ponferradina y Andorra serán los rivales en un tramo final no apto para cardiacos.
Mal la Cultural, mejor el Ourense y 1-0 en el marcador. La Cultural Leonesa arrancó el partido en O Couto con la energía que requería una auténtica final. Chacón y Pibe mostraron intensidad desde el pitido inicial, y la presión alta hizo pensar en un equipo dispuesto a imponer condiciones. La afición desplazada también empujaba, sabedora de lo que estaba en juego.
Pero el entusiasmo duró lo que tardó en aparecer el primer error. A los nueve minutos, Fornos se precipitó al suelo y abrió una autopista para que Carbonell anotara el único gol del encuentro. El guion se torció en el primer acto, y como en jornadas anteriores, la Cultural encajó demasiado pronto.
Otro error, otra derrota
Las claves del partido
El encuentro se rompió en el minuto 9 con el único gol del partido, fruto de un fallo grave de Fornos. El central se precipitó al lanzarse al suelo y dejó vía libre a Carbonell para marcar. La Cultural volvió a mostrar fragilidad en los primeros minutos, un patrón que se repite y penaliza siempre.
Aunque la Cultural tuvo la posesión durante buena parte del partido, especialmente en la segunda mitad, su juego fue plano, sin desborde ni remate claro. Las llegadas fueron aisladas y poco peligrosas. Ni las bandas ni el juego interior conectaron lo suficiente como para generar ocasiones de gol reales.
La tensión por la importancia del partido se notó desde el primer momento. El equipo leonés mostró ansiedad en la toma de decisiones, nerviosismo en los últimos metros y desorden emocional, como evidenció Txus Alba en el tramo final. La presión por el ascenso empieza a pasar factura.
Sin respuesta tras el golpe
Lejos de reaccionar con claridad, el conjunto de Llona se atascó. El Ourense se mostró cómodo con ventaja, cerrando espacios y lanzando contras peligrosas. La Cultural, por su parte, se fue hundiendo en errores no forzados, imprecisiones y una evidente desconexión entre líneas.
Ni los disparos lejanos de Kevin Presa ni las tímidas llegadas por banda lograron generar verdadero peligro. Entre los minutos 20 y 35, el equipo leonés pareció aturdido. Manu Justo no aparecía, Chacón se diluía, y el Ourense se limitaba a gestionar el partido con orden.
El segundo tiempo: dominio estéril, ansiedad creciente
Tras el descanso, la Cultural volvió a intentarlo, pero el guion fue el mismo: muchas intenciones, poca claridad. Pibe seguía siendo el único con chispa en el frente ofensivo, aunque sus intentos siempre quedaban neutralizados. Escobar y Calderón entraron desde el banquillo para sumar efectivos arriba, pero el problema era más profundo: la Cultural no encontraba cómo hacer daño real.
La falta de precisión, la ansiedad en las decisiones y la solidez defensiva del Ourense hicieron estériles los intentos leoneses. Ni las jugadas a balón parado ni las llegadas por banda encontraron rematador. El paso de los minutos solo añadió nervios y tensión a un equipo cada vez más precipitado.
Últimos suspiros, misma impotencia
Ya en los minutos finales, la Cultural acumuló llegadas pero sin veneno. Escobar remató fuera de cabeza, Víctor Ruiz rozó el empate, y Chacón probó suerte desde fuera del área sin éxito. Hasta el portero Bañuz subió a rematar el último córner de la desesperación. No fue suficiente.
El pitido final certificó no solo una derrota, sino una ocasión de oro desperdiciada. La Ponferradina se escapa a dos puntos y la Cultural se mete en una recta final no apta para corazones frágiles: Barakaldo, Ponferradina y Andorra serán jueces de un equipo que este domingo no dio la talla en su “final”.