Rodri Ríos decide una final inolvidable y hace al Ceuta 'campeón de campeones'
Desde el minuto uno, la final por el título de campeón de campeones entre Ceuta y Cultural y Deportiva Leonesa prometía emociones fuertes. La Cultural, con una salida fulgurante, dominó los primeros compases y encontró el premio muy pronto. En el minuto 4, Samanes sorprendió a todos con un potente disparo desde fuera del área que se coló en la portería defendida por Pedro López (0-1).
Ceuta reaccionó rápido. Tras unos minutos de presión intensa, Escudero empató en el 15' con un remate desde dentro del área. El duelo no bajó revoluciones y apenas tres minutos después, Escobar culminó una jugada iniciada por Pibe con un disparo que primero tocó el poste y, tras recoger el rechace, firmó el 1-2.
La Cultural, letal a la contra
El Ceuta, herido en su orgullo, lanzó todo su arsenal ofensivo. En el minuto 20, un disparo se estrelló en el larguero, y poco después Amigo se lució con varias paradas espectaculares que mantuvieron el marcador. Sin embargo, la Cultural volvió a golpear. En el 34', Chacón culminó una gran jugada individual iniciada con un taconazo de Escobar para poner el 1-3. La Cultural se iba al descanso con una ventaja merecida, aunque el Ceuta ya había dado señales de peligro.
Chacón dice adiós a lo grande
Las claves del partido
La Cultural dominó con claridad los primeros 45 minutos, pero tras el descanso fue incapaz de mantener el ritmo. Encajó tres goles en apenas cinco minutos (del 47’ al 51’) y mostró una gran fragilidad defensiva. El bajón físico fue evidente y, como en otros partidos de 2025, el equipo solo ofreció fútbol de calidad durante una mitad.
El delantero ceutí, exjugador de la Cultural, entró en el minuto 81 y fue decisivo. En el 90+2 cazó un balón en el área y marcó el 4-3 definitivo, sentenciando el partido en el descuento. Su experiencia y olfato fueron determinantes en el tramo final ante una Cultural con diez hombres.
El portero leonés evitó una goleada mayor con intervenciones clave durante todo el encuentro. En la primera parte sostuvo a su equipo durante el asedio ceutí y en la segunda evitó al menos dos goles cantados. Sin su actuación, la Cultural habría caído antes y con un resultado más abultado.
El Ceuta resurge tras el descanso
La segunda parte comenzó con una Cultural irreconocible. Nada más reanudarse el juego, Álvaro cometió un penalti claro sobre Aquino, que él mismo convirtió en el 47' para el 2-3. Solo cuatro minutos después, Zalazar culminó la remontada momentánea con el 3-3 tras un desajuste defensivo leonés.
A partir de ahí, el Ceuta tomó el control total del partido. La Cultural apenas salía de su campo, con Amigo multiplicándose bajo palos para mantener a flote a los suyos. Los cambios de Raúl Llona no lograron cambiar la dinámica. En el 79’, Adri Ruíz fue expulsado por una entrada desmedida, dejando a los leoneses con diez y muy mermados física y anímicamente.
Rodri Ríos, el golpe final
Ya en el descuento, cuando parecía que el partido se iría a la prórroga, apareció Rodri Ríos. El exjugador de la Cultural, con olfato de killer, cazó un balón suelto en el área en el 90+2 para hacer el 4-3 definitivo y silenciar a su antiguo equipo. Un gol que dolió en León, pero que desató la locura en el Alfonso Murube.
Ambos equipos celebraron el ascenso a Segunda División, pero el título de supercampeón de Primera RFEF viaja a Ceuta.
0-1, min. 4, Samanes;
1-1, min. 15, Escudero;
1-2, min. 18, Escobar;
1-3, min. 34, Chacón;
2-3, min. 47, Aquino (p.);
3-3, min. 51, Zalazar;
4-3, min. 90+2, Rodri Ríos.