La entrada de inversores familiares refuerza el plan de expansión de Hijolusa que se marca como objetivo facturar 500 millones
ProA Capital y la familia Gómez han acordado reforzar el capital de Somos Hijolusa, incorporando grandes family offices con vocación de permanencia a largo plazo. Según el comunicado oficial, la operación “supone dotar al Grupo Somos Hijolusa de unos inversores con capacidad financiera y visión estratégica en el mundo de la alimentación”.
En este nuevo escenario inversor, ProA Capital ha reducido su participación al 25%, mientras que los vehículos de inversión de Mendibea, Onchena, Llapan y Anémona, junto a varios directivos clave del grupo, también han entrado con un 25% del accionariado. Los hermanos José Luis y Carlos Gómez mantienen la mitad del capital, “reforzando así su compromiso en el proyecto empresarial”.
Plan estratégico y crecimiento
El grupo, que integra Patatas Hijolusa, Agrícola Villena y Natuber, proyecta un ambicioso plan estratégico para los próximos cinco años, que busca superar los 500 millones de euros de facturación.
Entre los pilares de este crecimiento destacan “el crecimiento orgánico con clientes estratégicos”, además de “la expansión internacional en productos de alto valor añadido” y la exploración “de adquisiciones estratégicas que generen sinergias en productos y mercados de interés”.
Actualmente, Somos Hijolusa emplea a más de 1.000 personas y cuenta con cuatro plantas productivas en León, Alicante, Cádiz y Vitoria, alcanzando una facturación anual superior a 250 millones de euros.
Innovación y expansión internacional
El grupo se ha destacado por su capacidad de innovación en productos frescos de alto valor añadido, como las patatas BabyPat, los boniatos Sweetpat y los palitos de zanahoria, que han marcado tendencia en el mercado español. Además, continúa su expansión internacional en países como Francia y Portugal, reforzando su presencia en el sector hortofrutícola europeo.
Asesoramiento en la operación
En la operación, AZ Capital y Garrigues asesoraron a ProA Capital, mientras que AyG, Pérez-Llorca y Uría Menéndez acompañaron a los nuevos inversores, garantizando la estructura financiera y estratégica de la transacción.