¿Puede ocurrir un nuevo apagón en León? Red Eléctrica dice que sí y lo ve próximo
Red Eléctrica advierte de un nuevo apagón inminente por fallos de tensión en la red | El operador del sistema detecta peligrosas oscilaciones ligadas al aumento de renovables y urge cambios técnicos para evitar un "cero eléctrico" como el de abril. León se encuentra entre las zonas sensibles.
Red Eléctrica de España (REE), el operador del sistema eléctrico nacional, ha emitido una seria advertencia a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) sobre el riesgo real e inminente de un nuevo apagón. Según el documento presentado el pasado 7 de octubre, se han registrado en las últimas dos semanas “variaciones bruscas de tensión” que, aunque aún dentro de los márgenes técnicos, podrían desestabilizar el sistema si no se actúa de inmediato.
La situación ha obligado a REE a solicitar a Competencia la modificación urgente de varios procedimientos operativos del sistema eléctrico. El objetivo: estabilizar la red en un contexto cada vez más volátil debido al peso creciente de la generación renovable.
¿Puede ocurrir un nuevo apagón en León? Red Eléctrica dice que sí y lo ve próximo
La pregunta inquieta a más de un leonés desde el histórico apagón del pasado 28 de abril. Y la respuesta no deja espacio a la tranquilidad: sí, puede repetirse. Así lo confirma un portavoz técnico de Red Eléctrica consultado por este medio:
“León está en una de las zonas donde se han detectado variaciones bruscas de tensión. No podemos descartar un nuevo corte si no se aplican cuanto antes los cambios que proponemos”.
El operador no especifica municipios concretos, pero fuentes del sector aseguran que la alta concentración de renovables en ciertas comarcas de Castilla y León, sumada al escaso consumo en horario solar, complica la estabilidad de la red.
¿Qué está fallando en la red eléctrica?
Según REE, el problema radica en la rápida transformación del sistema eléctrico español. La penetración masiva de energías renovables, en especial fotovoltaica y eólica, ha traído consigo tecnologías que no regulan la tensión de forma continua y pueden modificar su producción en segundos. Esto, sumado al auge del autoconsumo, ha reducido la previsibilidad de la demanda y debilitado la capacidad de reacción del sistema.
Además, buena parte de las instalaciones renovables de pequeña potencia —especialmente paneles solares domésticos— no están bajo el control directo del operador, lo que impide anticipar su comportamiento ante una caída de tensión.
Medidas de urgencia: 30 días para evitar un colapso
Red Eléctrica propone aplicar medidas temporales durante 30 días (prorrogables hasta 45) para contener la amenaza de un nuevo "cero eléctrico". Entre ellas: Flexibilizar la publicación del Programa Diario Viable Provisional para anticipar ajustes técnicos, obligar a las instalaciones redespachadas a reservar su potencia en mercados de balance, exclusión de instalaciones transfronterizas (Marruecos y Andorra) en ciertas fases del proceso de reequilibrio y seguimiento obligatorio del programa de rampas (PTR) incluso para instalaciones sin ofertas activas.
Estas medidas buscan frenar los efectos de las oscilaciones de tensión, reducir el uso de energía de emergencia y garantizar reservas suficientes en momentos críticos.
¿Qué dice Competencia?
La CNMC ha aceptado abrir un trámite de audiencia pública exprés de solo cinco días para evaluar las modificaciones solicitadas. En su informe preliminar, el regulador reconoce que el sistema eléctrico ha evolucionado más rápido de lo que las normas técnicas pueden gestionar, y admite que "empiezan a aparecer desequilibrios graves".
¿Un problema de planificación?
El nuevo aviso de REE levanta también críticas sobre la falta de previsión que llevó al apagón de abril. Aquel “cero eléctrico”, que dejó sin suministro a miles de usuarios durante horas, no activó medidas correctivas suficientes, según se desprende del propio escrito remitido ahora a Competencia.
Fuentes del sector eléctrico señalan que la transición energética “se ha hecho sin adaptar suficientemente los mecanismos de control del sistema”, y advierten que si no se modernizan los protocolos de operación, la inestabilidad será recurrente.
¿Qué puede pasar ahora?
El escenario que dibuja Red Eléctrica es claro: si no se ajustan los procedimientos técnicos y se garantiza la capacidad de respuesta rápida del sistema, el riesgo de nuevos apagones es alto. En especial en días con alta producción solar, baja demanda y respuesta lenta de la generación tradicional.
León, por su ubicación en una red interconectada y con fuerte peso de renovables, podría ser de nuevo una de las provincias afectadas.
Las próximas semanas serán clave para comprobar si las medidas temporales bastan… o si el sistema necesita una reforma más profunda y urgente.