El Talgo Avril 107 se cae 'sine die' de la Variante de Pajares y deja a León sin la prevista renovación de sus trenes de alta velocidad
Los problemas técnicos de los trenes Avril (serie 106), que iban a ser la punta de lanza de Renfe para explotar la nueva Variante de Pajares y reducir los tiempos entre León y Madrid, dejan en suspenso la mejora para la incorporación de su 'hermano mayor' a este tramo.
La operadora ferroviaria ha decidido apartar estas unidades de uno de sus principales corredores, el Madrid-Barcelona, y reorganizar su flota, lo que descarta por completo que las nuevas unidades que entrarán en servicio puedan prestar servicio en León.
El resultado es claro: León continuará operando con los trenes actuales de alta velocidad (106), sin el salto tecnológico y de prestaciones que prometía el Avril (107) y que ahora irá previsiblemente a los grandes corredores.
Un fallo repetido en cinco unidades
La decisión de dejar fuera algunos 106 se produce después de que en una revisión rutinaria se detectaran fisuras en el bogie de un S106 que prestaba el servicio Avlo entre Madrid y Barcelona. El hallazgo llevó a inspeccionar el resto de trenes Avril asignados a la ruta —cinco en total— y a confirmar la misma anomalía en todos ellos.
Los bogies, elementos clave que integran ruedas, ejes, frenos y suspensión, tuvieron que ser sustituidos. Durante el proceso se redujo la velocidad máxima en un tramo de 190 kilómetros, pero finalmente Renfe optó por retirar completamente el modelo del corredor para evitar riesgos.
Sin los 106 en servicio los 107 (nuevos 'Avril') que ya habían realizado pruebas en la Variante y León meses atrás están destinados a entrar en servicio en los puntos donde se ha procedido a la retirada de unidades defectuosas y León tendrá que esperar para ver esas nuevas unidades.
Efecto dominó en la flota
El vacío dejado por los Avril en la línea Madrid-Barcelona se ha cubierto con trenes Siemens S103 procedentes del corredor Madrid-Sevilla. A su vez, parte del servicio andaluz se ha reasignado a unidades S100, mientras que algunos Avril se han destinado al Levante. Los 107 cubrirán en semanas esas 'vacantes'.
Esta reorganización interna no deja margen para desplegar el S107 en la Variante de Pajares, pese a que su velocidad y polivalencia eran clave para aprovechar plenamente la infraestructura recién inaugurada.
Renfe asegura que el problema está controlado
En un comunicado emitido a finales de julio, Renfe explicó que había “adoptado las medidas necesarias para garantizar el funcionamiento del servicio” y que, tras reforzar las revisiones y sustituir las piezas afectadas, “los trenes están operando sin ningún tipo de anomalía”.
Aun así, la compañía confirmó la reorganización de servicios y la retirada del modelo en la línea Madrid-Barcelona, lo que implica también aplazar indefinidamente su despliegue en la conexión leonesa.
Un historial accidentado
El episodio de los bogies se suma a una cadena de contratiempos del Talgo Avril: retraso en la entrega, que derivó en una multa de 116 millones a Talgo, problemas de puntualidad en varios corredores y fallo informático a principios de 2025, conocido como 'efecto 2000'.
Ahora, con las unidades aún en garantía —fueron entregadas en mayo de 2024—, se abre un nuevo frente entre Renfe y Talgo sobre quién debe asumir el coste de las reparaciones.
Alta velocidad en León: continuidad, no mejora
La Variante de Pajares, inaugurada con la promesa de recortar tiempos y mejorar el servicio, seguirá dependiendo de las composiciones ya en circulación, sin los avances técnicos ni la polivalencia de los Avril 107, que se desplegaron en la Variante en su periodo de pruebas, pero que ahora no estarán en esta línea.
En la práctica, la alta velocidad a León mantiene su situación actual en materia de material rodante: trenes de generaciones anteriores, sin cambios en la experiencia de viaje ni en la competitividad frente a otros corredores nacionales donde sí operarán modelos más recientes.