El Bembibre HC firma su primera victoria histórica ante el Cerdanyola (3-5)
El Bembibre H.C. logró en Cerdanyola una victoria que el propio club describe como “histórica”: por primera vez consiguió derrotar al decano del hockey patines femenino tras imponerse por 3-5 en la séptima jornada de la OK Liga Iberdrola. El choque, disputado en el pabellón Can Xarau, mantuvo una intensidad altísima y un ritmo constante de llegadas a ambas porterías.
Las locales llevaron la iniciativa durante gran parte del encuentro. De hecho, el primer tanto llegó a ocho minutos del descanso, cuando un disparo de Noa González desequilibró el marcador (1-0). Aun así, el equipo de Carlos Figueroa mantuvo “paciencia y pegada”, según reconoce el propio club en la nota, para sostenerse en un duelo que iba a decidirse en un final eléctrico.
Remontadas, expulsiones y un desenlace fulgurante
Tras el paso por vestuarios, Txell Gimeno igualó el partido apenas un minuto después de la reanudación (1-1), pero el Cerdanyola respondió en treinta y dos segundos para recuperar la ventaja (2-1). Las Águilas no aflojaron y, a los siete minutos y medio del reinicio, Carla Castro volvió a empatar (2-2).
El juego se endureció y llegaron las azules a Carla Ferrer y Gimeno, una para cada equipo. Cuando las locales recuperaron la cuarta jugadora, Irene Torres aprovechó la superioridad para firmar el 3-2. Nada hizo presagiar entonces que el choque se decantaría del lado berciano.
Sin embargo, tres minutos y medio de acierto total cambiaron la historia. Bea Várzeas empató desde la frontal del área (3-3) a falta de 3:40; después, una contra culminada por Carla Castro dio la vuelta al marcador a 1:58 del final (3-4). El último golpe llegó a siete segundos de la bocina, cuando Gimeno firmó el 3-5 definitivo. El Bembibre H.C. se mantiene así en la zona noble de la clasificación y acaricia su clasificación para la Copa de la Reina.
Figueroa: “Los tres puntos nos saben a gloria”
El entrenador berciano, Carlos Figueroa, definió el choque como “difícil”, especialmente por la presión ejercida por el Cerdanyola durante la primera mitad. Reconoció que su equipo tuvo problemas para enlazar acciones y generar peligro, aunque destacó que las superioridades numéricas ayudaron a equilibrar el encuentro.
Según explicó, el tramo final se decidió cuando el conjunto local “cometió dos o tres errores importantes de pase en su salida”, momento que el Bembibre aprovechó para generar “muchísimo peligro” y voltear el marcador. Pese a que con el empate se habría dado por satisfecho, admitió que “los tres puntos nos saben a gloria”.
Figueroa subrayó el esfuerzo coral de las jugadoras: “Somos un equipo con aciertos y errores, y el día que falta una, la que entra la sustituye”. El técnico pidió mantener “humildad” de cara al próximo compromiso del domingo ante el Alpicat.