Al menos 69 muertos y cientos de heridos por un fuerte terremoto en Filipinas
En plena madrugada, un potente terremoto sacudió el centro de Filipinas, causando escenas de pánico en las calles. Los edificios comenzaron a estremecerse violentamente, y la histórica iglesia de Bogo quedó prácticamente destruida. Las personas que se encontraban en la vía pública se abrazaban con temor mientras levantaban la vista para esquivar la caída de escombros. Un conductor logró captar en video cómo el puente que cruzaba se balanceaba con fuerza debido al movimiento telúrico, mientras varios motociclistas se detenían y se sentaban en el asfalto, atónitos. Numerosas áreas se quedaron sin electricidad.
El epicentro del terremoto se localizó en el mar, a unos 13 a 17 kilómetros al noreste de Bogo, con una profundidad muy superficial de apenas 5 kilómetros, lo que intensificó su impacto en tierra firme. Las sacudidas se sintieron con especial fuerza en Cebú, Leyte, Masbate y Negros Occidental, y llegaron incluso a percibirse en lugares tan alejados como Camarines Sur, en la isla de Luzón.
El vicealcalde de San Remigio, Alfie Reynes, alertó sobre la situación crítica que atraviesa la zona: “Llueve intensamente, no hay electricidad y en el norte hay escasez de agua porque las líneas de suministro quedaron dañadas por el terremoto”. En respuesta, el presidente Ferdinand Marcos Jr. ordenó el despliegue de personal de emergencia y equipos médicos, mientras cuadrillas intentaban llevar maquinaria pesada a una aldea montañosa donde un deslizamiento de tierra había sepultado viviendas informales, según informó Rex Ygot, responsable local de mitigación de desastres.
Una amenaza constante en el Anillo de Fuego
Filipinas se encuentra en el llamado Anillo de Fuego del Pacífico, una de las zonas con mayor actividad sísmica del planeta. Cada año, el país registra cientos de terremotos, aunque la mayoría no suelen causar daños. Sin embargo, los expertos han expresado preocupación porque este reciente sismo se originó en una falla poco estudiada hasta ahora, lo que indica la existencia de riesgos geológicos aún no identificados. Este evento también pone en evidencia la necesidad urgente de reforzar las normas de construcción antisísmica, especialmente en las zonas rurales y en edificaciones antiguas.
El Anillo de Fuego es una extensa franja de más de 40.000 kilómetros que bordea el océano Pacífico, pasando por América, Asia y Oceanía. Es responsable de cerca del 90 % de los terremotos del mundo y alberga el 75 % de los volcanes activos y dormidos. En esta región convergen varias placas tectónicas —como la del Pacífico, Nazca, Filipina e Indoaustraliana— que al colisionar, deslizarse o hundirse unas bajo otras generan la intensa actividad sísmica y volcánica característica del área.