Israel intercepta la Flotilla rumbo a Gaza con 30 españoles a bordo
La Global Sumud Flotilla, integrada por más de 40 embarcaciones que partieron de Barcelona a principios de septiembre con el objetivo de abrir un corredor humanitario hacia la Franja de Gaza, fue interceptada en la tarde del miércoles por buques de la Marina israelí. Según confirmó el Ministerio de Exteriores de Israel, la actuación se realizó “de forma segura” y los pasajeros se encuentran “sanos y salvos”, aunque trasladados hacia puertos israelíes.
Entre los interceptados se encuentra la exalcaldesa de Barcelona, Ada Colau, quien viajaba en el velero Sirius. En un vídeo difundido antes de quedar incomunicada, Colau denunció que Israel los había “detenido ilegalmente” y pidió a la ciudadanía “hacer el máximo ruido posible” para exigir su liberación.
Cañones de agua y hostigamiento en la travesía
Los activistas han relatado que las maniobras de la Marina israelí incluyeron el uso de cañones de agua a presión y drones de reconocimiento. “Me están rociando de agua”, narró en directo en TVE el activista Rafael Borrego, mientras mostraba las dificultades para mantener la conexión. Otro de los tripulantes, Lorenzo D’Agostino, explicó que su barco se encontraba a unas 22 millas de Gaza cuando comenzaron los ataques de agua a presión.
La organización de la flotilla asegura que al menos 15 barcos han sido interceptados, entre ellos el Alma, el primero en ser abordado, además del Adara, Aurora, Grande Blu o Morgana.
El papel de España y la UE
El Ministerio de Exteriores español, dirigido por José Manuel Albares, ha puesto en marcha una unidad de seguimiento permanente en coordinación con la Unión Europea. Se calcula que entre los pasajeros retenidos hay una treintena de españoles, además de nacionales de Irlanda, Italia y Turquía.
España había enviado el Buque de Acción Marítima “Furor”, que permanece a unas 120 millas de Gaza, el límite de la “zona de exclusión” fijada por Israel. Sin embargo, fuentes diplomáticas confirmaron que no intervendrá en la zona de mayor riesgo, lo que ha generado críticas de los activistas. “Ha sido una gran decepción saber que no nos van a acompañar”, lamentó Colau antes de ser interceptada.
Antecedentes y consecuencias
La interceptación recuerda a otros episodios vividos en la última década contra flotillas que intentaban romper el bloqueo naval sobre Gaza. En junio, Israel detuvo el barco Madleen y deportó a varios de sus tripulantes en menos de 72 horas.
Los organizadores de la Global Sumud Flotilla han acusado a la comunidad internacional de “cobardía disfrazada de diplomacia”. A su juicio, tanto España como Italia “han renunciado a proteger vidas” al mantener sus buques lejos de la zona de riesgo.
Mientras, un segundo convoy, el barco Conscience, zarpó esta semana desde Otranto (Italia) para sumarse a las misiones humanitarias, en un Mediterráneo cada vez más tensionado por el bloqueo sobre Gaza.