Marcos Ortega (PP) asume la Alcaldía de Gordaliza del Pino con el apoyo implícito del PSOE por su arraigo local
El municipio leonés de Gordaliza del Pino ha vivido este lunes un insólito cambio de rumbo político: Marcos Ortega Ramón, del Partido Popular, ha sido investido alcalde pese a que su grupo se encuentra en minoría, con solo dos concejales frente a los tres del PSOE. La decisión se ha producido después de que el anterior regidor, el socialista Jaime Villa Bajo, renunciara hace dos semanas por “motivos personales”.
Lejos de presentar un nuevo candidato, el Grupo Socialista optó por abstenerse en la votación plenaria, permitiendo así la investidura del popular Ortega como único aspirante al cargo. El argumento: “primar el arraigo sobre las siglas”, ya que los dos concejales restantes del PSOE no residen en el municipio, a diferencia del nuevo regidor del PP.
Un gesto “por coherencia” que rompe con la lógica partidista
El propio Jaime Villa Bajo, que seguirá como edil en la oposición, justificó la decisión de su grupo afirmando que “la representación municipal debe estar vinculada al conocimiento directo del pueblo y sus necesidades”. Con ello, los socialistas han puesto fin a una etapa de gobierno con mayoría absoluta que comenzó en 2019 y fue revalidada en 2023.
Villa Bajo defendió que la renuncia se debe a “la exigente tarea de la gestión municipal” y a razones de tipo personal que le impiden seguir al frente del Ayuntamiento. En todo caso, subrayó que continuará implicado en los asuntos locales desde su nuevo rol como concejal.
Cambios en el partido judicial de Sahagún
El relevo en Gordaliza del Pino se suma a una dinámica más amplia en la comarca, ya que ya son ocho los ayuntamientos del partido judicial de Sahagún que han cambiado de signo político o de alcalde durante el actual mandato municipal. La gobernabilidad en municipios pequeños, donde la política local suele verse condicionada por la cercanía personal y la vinculación al territorio, ha provocado situaciones como la vivida en Gordaliza, donde el arraigo ha pesado más que la disciplina de partido.
En esta nueva etapa, Ortega Ramón gobernará en minoría, en un contexto donde la colaboración entre formaciones será clave para garantizar la estabilidad. Aun así, el pleno de investidura ha dejado claro que la voluntad de entendimiento ha prevalecido sobre la confrontación.
Una historia política marcada por la excepción
Gordaliza del Pino ya había conocido en legislaturas anteriores alcaldes sin vinculación directa con el municipio, tanto del PP como del PSOE. Esta vez, sin embargo, el relevo rompe esa tendencia y devuelve el bastón de mando a un vecino del pueblo, lo que podría facilitar la comunicación directa con los ciudadanos y el seguimiento de los asuntos cotidianos.
Así, el Ayuntamiento leonés inicia una etapa bajo gobierno popular, pero con una oposición mayoritaria del PSOE y con un mensaje claro: en la política municipal, la proximidad con el territorio puede ser más determinante que el color de la papeleta.