Addoor Sticky
El resumen del año

La tragedia envuelve a León en llamas

Los bomberos del SEPEIS de la Diputación de León del Parque de Cistierna, actuando contra el fuego en Barniedo, Boca de Huérgano, donde también han intentado frenar el avance de las llamas realizando contrafuegos. Foto: Diputación
Cuadrillas desplazadas a San Cristóbal de Valdueza (León), para el incendio que afecta a varias pedanías de Ponferrada. Foto: César Hornija.
Cuadrillas desplazadas a San Cristóbal de Valdueza (León), para el incendio que afecta a varias pedanías de Ponferrada. Foto: César Hornija.
Cuadrillas desplazadas a San Cristóbal de Valdueza (León), para el incendio que afecta a varias pedanías de Ponferrada. Foto: César Hornija.
Cuadrillas desplazadas a San Cristóbal de Valdueza (León), para el incendio que afecta a varias pedanías de Ponferrada. Foto: César Hornija.
Cuadrillas desplazadas a San Cristóbal de Valdueza (León), para el incendio que afecta a varias pedanías de Ponferrada. Foto: César Hornija.
Cuadrillas desplazadas a San Cristóbal de Valdueza (León), para el incendio que afecta a varias pedanías de Ponferrada. Foto: César Hornija.
Cuadrillas desplazadas a San Cristóbal de Valdueza (León), para el incendio que afecta a varias pedanías de Ponferrada. Foto: César Hornija.
Cuadrillas desplazadas a San Cristóbal de Valdueza (León), para el incendio que afecta a varias pedanías de Ponferrada. Foto: César Hornija.
Cuadrillas desplazadas a San Cristóbal de Valdueza (León), para el incendio que afecta a varias pedanías de Ponferrada. Foto: César Hornija.
Cuadrillas desplazadas a San Cristóbal de Valdueza (León), para el incendio que afecta a varias pedanías de Ponferrada. Foto: César Hornija.
Drama con los incendios: cinco fallecidos, récord de superficie calcinada y continua bronca política | El año concluye con la incertidumbre de la peste africana y una nueva orden que permite la caza masiva del jabalí, mientras el Gobierno bloquea el envío del informe de la situación del lobo a Bruselas

2025 será recordado por el drama con los incendios: cinco fallecidos en León y Ávila, récord de superficie calcinada, cientos de viviendas calcinadas, incluso algunos pueblos enteros, miles de personas desalojadas y continua bronca política entre la Junta, la oposición y el Gobierno central por los recursos activos, el personal y las competencias. 

Miles de hectáreas arrasadas protagonizan un año de récord, con una oleada histórica en casi tres semanas de agosto, con condiciones meteorológicas adversas y numerosos puntos con incendios desatados, una tormenta perfecta que llegó al presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, a comparecer en las Cortes el día 29 de agosto. El año no solo fueron llamas. Concluye con la incertidumbre de la peste africana y una nueva orden que permite la caza masiva del jabalí, mientras el Gobierno bloquea el envío del informe sexenal sobre la situación del lobo a Bruselas.

Así, este ejercicio quedará marcado por la pérdida humana de Abel Ramos, de 35 años, y Jaime Aparicio, de 37, ambos voluntarios en el incendio de Castrocalbón, Ignacio Rumbao, de 57 años, natural de Ourense, brigadista y conductor de autobomba en el incendio de Compludo; y Moisés Gallego, de 66 años, falleció intentando extinguir un fuego en Villarejo de Órbigo, al que se suma Emilio, un bombero forestal de 59 años, peón-manguerista, de la Mancomunidad de Los Galayos, que murió en un accidente de tráfico cuando se dirigía al incendio forestal desatado entre Cuevas del Valle y Mombeltrán el 28 de julio, y por el que la Guardia Civil detuvo posteriormente a un varón que confesó haber provocado de forma intencionada el incendio por intereses laborales.

En relación a la superficie, los incendios forestales arrasaron 138.538 hectáreas, un año récord que supone siete veces más que el promedio del último decenio, cuando se ha situado en 19.572 hectáreas. Además, en los últimos diez años se produjeron 1.415 fuegos al año, de media, pero la mayor parte se quedaban en conatos, mientras que este ejercicio la cifra ha sido de 1.212, lo que indica un año muy proclive en la generación de grandes incendios forestales, los que superan las 500 hectáreas. De hecho, se contabilizan 23 de estos trágicos sucesos, 13 de los cuales se radicaron en León, cuatro en Ávila, tres en Zamora, dos en Palencia y uno en Salamanca. Cabe recordar, que algunos de ellos afectaron a más de una provincia y que se centraron principalmente en el oeste autonómico.

Según los datos de la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio se han quemado en Castilla y León 40.108 hectáreas de superficie arbolada, la segunda cifra más alta en los últimos 15 años, tras las 45.200 de 2022. Además, este año se suman 66.278 de matorral y monte bajo y 32.152 de pastos. Todo ello, rodeado de un clima laboral también complicado por parte de los trabajadores del dispositivo, que acusan a la Consejería de haber incumplido varios de los compromisos trasladados, y de una situación política que también ha trastocado los planes de la Junta, que ha visto como han decaído dos decretos en las Cortes para mejorar el operativo y la figura del bombero forestal, algo que el sector y la oposición achacó “a la falta de diálogo de la Consejería”.

La peste porcina

El último trimestre de este año también será recordado por la detección en Cataluña de varias jabalíes, positivos en peste porcina africana, y su incertidumbre hacia el sector porcino nacional, que ve cómo han bajado sus precios en las últimas semanas. Para evitar la entrada y reducir las posibilidades de llegada de esta enfermedad, que por otro lado no es una zoonosis y no es transmisible al ser humano, la Consejería de Medio Ambiente, en su competencia con la fauna silvestre, aprobó una orden por la que permite la caza masiva del jabalí en la Comunidad, y que estará vigente hasta febrero de 2027, si bien se acortará o prorrogará, en función de la evolución de la enfermedad.

La Consejería, no obstante, realizó el año pasado más de 3.000 muestras a jabalíes sospechosos de peste porcina que aparecieron muertos, entre los que no se incluyen los atropellados en accidentes de tráfico. Todos ellos resultaron negativos. Ahora, con la orden recientemente aprobada para reducir la población de este suido, este número de análisis se incrementará, pues habrá que hacérselas a todos aquellos cadáveres de jabalíes que se hallen en el monte, además de un muestreo al azar en cada batida. La caza del animal se elevó hasta el punto de que en el año 2012 se cazaron 29 jabalís en la Comunidad frente a los 52.000 del último al año.

Igualmente, la Federación de Caza de Castilla y León recuerda que está en contra de cualquier tipo de control telemático de capturas de carácter obligatorio en el desarrollo de la práctica cinegética y que “nunca ha promovido y alentado nada para promover su implantación, sino todo lo contrario”, a raíz del aumento de las capturas del jabalí, si bien el el consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, defiende que el 62 por ciento de los cazadores precinta sus piezas electrónicamente en 2025.

Situación del lobo

Como todos los años, el lobo también estuvo a vueltas en el sector. La ley obliga al Gobierno central a enviar a la Unión Europea un informe con carácter sexenal con la situación de la población lobera en el país, para que Bruselas decide si la gestión recae sobre las comunidades autónomas, para que puedan decidir sobre el animal, o si la mantiene en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (Lespre), en el que se encuentra desde 2021.

La Junta asegura que el Ejecutivo bloquea esta situación al no hacer efectivo el envío de ese informe, que demostraría ante las autoridades europeas que el censo del lobo y de manadas ha aumentado, cómo se publicó en 2024. De hecho, el Gobierno autonómico considera que los ataques de ganado por daños de lobo en la Comunidad en 2024 siguen creciendo hasta alcanzar los 3.973, un aumento del 11 por ciento respecto a 2023 (3.566 ataques), de un 23 por ciento respecto a 2022 (3.237) y de un 47 respecto a 2021 (2.694).

Un nuevo vecino

Tras años de preparación de los terrenos y ultimar los nuevos escenarios, 2025 fue el año elegido para el regreso de linces ibéricos a Castilla y León. Concretamente, se ha elegido una zona, el Cerrato palentino, donde ya residió hace medio siglo. La primera de las sueltas se produjo el 17 de febrero, lo que marcó el inicio del proyecto de reintroducción con la liberación de dos ejemplares, Virgo y Vuelvepiedras. A partir de ahí llegaron más.

Los linces liberados en los últimos meses en el Cerrato palentino se están asentando gracias “a la buena calidad” de la zona, principalmente por la alta densidad de conejos, y en estos momentos los agentes forestales encargados de esta vigilancia ya han avistado acercamientos entre al menos dos parejas, de cara a la época de celo, un periodo que se desarrolla entre diciembre y enero, pero en el que los meses previos los machos hacen movimientos exploratorios con las hembras.

La consolidación de los ejemplares se está desarrollando “con buenas perspectivas”, a pesar, incluso, de la muerte de dos de ellos durante este verano, uno atropellado y otro ahogado en un canal, dos malas noticias que, sin embargo, estaban entre las posibilidades, como así ha sucedido en otras reintroducciones de este felino en España.

En las últimas semanas llegó otra buena noticia, con la liberación de un nuevo ejemplar, cedido por Castilla-La Mancha. Es el noveno en total (aunque el séptimo con vida), y el tercero que llega del área ciudadrealeña de Sierra Morena.