La mitad de los conductores insulta a otros conductores
La Fundación Vinci Autoroutes ha presentado su 15.º Barómetro europeo de la conducción responsable, una encuesta realizada por Ipsos a más de 12.000 personas en 11 países. En el caso de España, los datos muestran un leve cambio hacia comportamientos más seguros, aunque persisten numerosos hábitos peligrosos. Para Bernadette Moreau, delegada general de la fundación, “es el primer año en que la mayoría de los comportamientos evoluciona en la dirección correcta”, si bien advierte de que “la asunción de riesgos y los comportamientos incívicos siguen siendo demasiado frecuentes”.
Persisten las conductas agresivas en carretera
Aunque se detecta una reducción en ciertas actitudes agresivas, el 87 % de los conductores españoles afirma sentir temor por el comportamiento agresivo de los demás. La mitad de ellos (50 %) reconoce insultar a otros conductores, mientras que un 60 % admite pitar de forma inapropiada a quienes les molestan. Además, un preocupante 27 % declara pegarse intencionadamente al vehículo que va delante en señal de presión y el 21 % incluso se ha bajado del coche para enfrentarse a otro conductor.
Autocomplacencia frente a autocrítica
El barómetro refleja una notable discrepancia entre la percepción que los españoles tienen de su propia conducción y la que tienen del resto. Un 97 % se describe a sí mismo con calificativos positivos —vigilante (73 %), tranquilo (68 %) o respetuoso (18 %)—, mientras que un 70 % usa términos negativos para referirse a los demás conductores, como agresivos (30 %), nerviosos (31 %) o irresponsables (32 %). Pese a esta imagen positiva de sí mismos, muchos conductores reconocen comportarse de forma diferente al volante: el 14 % admite ser “otra persona” cuando conduce y un 27 % dice sentirse “como en una burbuja”, menos atento a los demás.
La distracción, una amenaza constante
Aunque el uso del móvil durante la conducción ha disminuido ligeramente respecto a años anteriores, sigue siendo muy elevado. El 65 % de los conductores reconoce utilizar el teléfono móvil o programar el GPS mientras conduce. Un 58 % habla por teléfono, el 32 % lo hace habitualmente, y un 15 % sigue escribiendo o leyendo mensajes o correos electrónicos en marcha. Además, un 33 % configura el GPS en circulación y un 8 % llega a ver vídeos o películas al volante.
El 77 % de los encuestados confiesa apartar la vista de la carretera durante más de dos segundos, lo que a 130 km/h equivale a recorrer 72 metros a ciegas. Los más jóvenes son los más propensos a estas conductas: el 74 % de los menores de 35 años habla por teléfono mientras conduce.
Fatiga y somnolencia, factores infravalorados
El 24 % de los conductores españoles afirma ponerse al volante pese a sentirse cansado. De estos, el 38 % ha sentido que cabeceaba mientras conducía, el 25 % se vuelve más agresivo o impulsivo y el 67 % reconoce que su atención disminuye y su mente divaga.
Durante los viajes largos, el 49 % conduce durante más de dos horas sin parar, a pesar de las recomendaciones. El tiempo medio de conducción antes de una pausa es de 2 horas y 47 minutos, que se eleva a 3 horas y 5 minutos en el caso de los hombres menores de 35 años.
Antes de viajar, el 82 % se acuesta tarde o se levanta temprano, el 64 % opta por salir de noche y el 74 % termina los preparativos justo antes de partir. Además, un 41 % no se detiene para dormir aunque tenga sueño, y un 36 % nunca cambia de conductor durante trayectos largos.
Alcohol, drogas y medicamentos: riesgos que persisten
Pese a la alta percepción del peligro (el 81 % considera arriesgado conducir ebrio), el 5 % de los conductores reconoce haber conducido bajo los efectos del alcohol alguna vez. Asimismo, un 10 % ha conducido tras consumir medicamentos que afectan la atención, el 2 % después de fumar cannabis y el 3 % tras consumir otras drogas como cocaína o éxtasis. En los hombres jóvenes de entre 16 y 24 años, este tipo de conductas tiene una incidencia del 0,5 %.
La seguridad de los operarios, en entredicho
Uno de los aspectos más preocupantes es la escasa atención hacia la seguridad de los trabajadores de carreteras. El 71 % de los conductores no reduce la velocidad ni toma las precauciones necesarias al acercarse a una zona de intervención. Además, el 48 % directamente olvida frenar cuando se aproxima a obras en la vía.
Estos datos cobran especial relevancia en países como Francia, donde en lo que va de 2024 se han producido más de dos colisiones por semana con furgonetas de intervención, y once técnicos han perdido la vida desde 2022.
Conclusión: un avance leve que necesita consolidarse
Los resultados del Barómetro europeo de la conducción responsable 2025 muestran señales de cambio entre los conductores españoles, con una ligera mejora en la atención y una moderación de ciertos comportamientos agresivos. Sin embargo, persisten múltiples riesgos relacionados con el cansancio, las distracciones, el consumo de sustancias y la falta de respeto por normas básicas de seguridad. Para la Fundación VINCI Autoroutes, se trata de un momento clave para reforzar las campañas de sensibilización y avanzar hacia una conducción más segura y consciente.