La Cultural recupera sensaciones y se impone a un muy 'peleón' Barakaldo

La Cultural y Deportiva Leonesa logró una victoria vital en el Reino ante un rival de empaque como el Barakaldo (2-1), en un partido de enorme desgaste físico, nervios a flor de piel y momentos de altísima tensión. Un tanto de Samanes en la primera mitad y un misil de Barri en la segunda marcaron la diferencia en un duelo que los visitantes convirtieron en una prueba de resistencia hasta el último aliento. La madera —hasta en tres ocasiones— salvó a los leoneses de un castigo mayor. Y el Reino, como tantas veces, se hizo fuerte en el aliento de los suyos.

Con este triunfo, los de Raúl Llona respiran en lo alto de la tabla, abriendo una brecha de cinco puntos sobre la Ponferradina, a la espera del partido del conjunto berciano. Pero más allá de la matemática, el equipo leonés mostró una imagen mucho más sólida, especialmente en el plano defensivo, donde nombres como Chacón o Bañuz se multiplicaron ante el empuje de un Barakaldo que nunca se rindió.

El resumen del partido

Una primera parte con nombre propio: Samanes

Bajo un cielo que se despejaba justo antes del pitido inicial, la Cultural saltó al campo con un planteamiento táctico afinado. Samanes, ocupando su hábitat natural en banda izquierda, ofreció oxígeno y amplitud, lo que permitió a Chacón liberarse en zonas interiores. La combinación no tardó en dar frutos: en el minuto 6 ya se intuía la conexión entre ambos, y al 7, Satrústegui rozó el gol tras un saque de esquina botado por el propio Samanes.

El Barakaldo, sin embargo, no tardó en mostrar sus credenciales. En el minuto 13, Pedernales rozó el poste con un disparo lejano, y a partir del 20, los visitantes comenzaron a ganar presencia en campo rival. Fue entonces cuando emergió de nuevo la figura de Samanes. En el minuto 29, Calderón le sirvió un pase medido y el extremo culturalista definió con clase para abrir el marcador. El Reino estallaba con un grito de alivio que se sintió como una liberación.

Con Bicho y Samanes generando peligro y una afición entregada, la Cultural llegó al descanso con ventaja. Aún así, el susto llegó en el 43, cuando Bañuz evitó el empate con una intervención clave.

Barri marca el segundo… y comienza el sufrimiento

Tras el descanso, el Barakaldo salió decidido a empatar. En el minuto 47, el larguero repelía un disparo que heló a la grada, y poco después, Revilla tuvo otra ocasión clara. La Cultural sufría, Manu Justo peleaba cada balón y Chacón trataba de hilvanar juego, pero el empuje vasco obligó a Llona a reaccionar.

Las cinco claves del partido

• El impacto de Samanes desde el inicio
  Ubicado en su banda izquierda natural, fue el jugador más desequilibrante en la primera mitad. Su gol en el minuto 29 rompió el partido y dio confianza a los locales.
• Solidez táctica de la Cultural
  El equipo de Raúl Llona supo sufrir y mantener el orden, especialmente en los momentos de mayor empuje del Barakaldo. La defensa aguantó con firmeza pese a las embestidas finales.
• El segundo gol, obra de Barri
  En el 73, cuando más sufría el equipo leonés, Barri apareció con un derechazo imparable. Ese tanto fue el que terminó marcando la diferencia y dio aire a la Cultural.
• Tres balones a la madera del Barakaldo
  El conjunto vasco rozó el gol en hasta tres ocasiones con disparos que se estrellaron en los postes. La falta de puntería y algo de fortuna evitaron el empate.
• Gestión del tramo final
  A partir del minuto 88, la Cultural resistió como pudo. El gol de Bito en el 93 puso el miedo en el cuerpo, pero el equipo supo cerrar el partido en medio del drama.

El técnico leonés movió el banquillo y dio entrada a Kevin Presa y Escobar por los tocados Samanes y Justo. Fue un giro acertado. En el minuto 73, tras una jugada muy elaborada, Barri soltó un derechazo imparable que se coló como un relámpago en la portería visitante. Era el 2-0, y el Reino volvía a estallar.

Pero el Barakaldo no se dio por vencido. Chacón salvó bajo palos el 2-1 en el 75, y acto seguido, otro disparo se estrelló en el palo. La tensión era máxima. La Cultural se replegó y los minutos finales fueron una batalla por mantener la calma. En el 93, Bito recortó distancias para el Barakaldo y dejó los últimos segundos para el drama. La última fue suya, pero no entró.

Una victoria con carácter

El pitido final desató el alivio. La Cultural sumó una victoria de carácter, forjada desde el sacrificio y la solidez. Chacón fue decisivo en todas las zonas del campo, y Barri, autor del segundo gol, se convirtió en el nombre del día. El Barakaldo, por su parte, firmó un partido valiente, con tres tiros a la madera y una actitud irreprochable.

En el Reino de León, con más de 10.000 almas alentando, se vivió una tarde de las que construyen campeonatos. De las que se recuerdan. De las que valen más que tres puntos.