Cultural-Barakaldo | Así lo hemos contado en directo

Un gol de Barri sostiene a una Cultural sufridora ante un Barakaldo incansable

Silvia García

El pitido final ha sido un suspiro colectivo. La Cultural Leonesa ha logrado una trabajadísima victoria por 2-1 ante un Barakaldo que nunca dejó de pelear y que, incluso, llegó a rozar el empate en dos ocasiones que se estrellaron en la madera. El segundo tanto de los leoneses, obra de Barri en el minuto 73, resultó determinante para asegurar tres puntos que costaron sudor, corazón y un buen puñado de nervios.

La segunda parte comenzó con la Cultural tratando de controlar el ritmo tras el descanso, aunque pronto se vio que el Barakaldo no venía a especular. En el minuto 47, el Reino de León enmudeció con un balón al larguero del conjunto visitante, un aviso claro de que la ventaja mínima no iba a ser suficiente. En el 49, Revilla la tuvo de nuevo, pero la reacción de la Cultural no se hizo esperar: Calderón y Manu Justo respondieron con una jugada que levantó a la grada.

Presión del Barakaldo

A partir del minuto 53, el Barakaldo intensificó su presión. La Cultural sufría. Manu Justo se vaciaba ante los centrales y Chacón lo intentaba, aunque sin claridad. Era un momento delicado: la sensación de agobio crecía y Llona decidió mover ficha. En el 67, con Samanes y Justo tocados, entraron Kevin Presa y Escobar. Y, justo cuando el Barakaldo se crecía, llegó el segundo estallido en el Reino.

Minuto 73: gol de Barri. Un derechazo imponente tras una jugada muy trabajada del conjunto leonés. El Reino rugía de nuevo. El 2-0 parecía un seguro de vida, pero el partido estaba lejos de cerrarse.

El milagro de Chacón

El Barakaldo respondió con furia. Chacón salvó un gol cantado en el 75 sacando bajo palos, y pocos minutos después, los visitantes estrellaban un nuevo disparo en el palo, esta vez tras un toque en un defensa local. La tensión crecía en las gradas, y los últimos minutos fueron un ejercicio de resistencia por parte de la Cultural, que ya pedía la hora desde el 88.

En el 93, llegó el tanto del Barakaldo. Bito recortaba distancias en el último suspiro y dejaba un minuto final cargado de dramatismo. El equipo vasco incluso tuvo la última, pero no logró perforar de nuevo la portería local. El Reino contuvo la respiración… hasta el pitido final.

Con más de 10.000 espectadores en las gradas, la Cultural sumó una victoria de carácter, de las que cuentan más allá de los puntos. El equipo de Raúl Llona volvió a ser sólido, con Chacón como líder silencioso y un Barri que se erigió como héroe inesperado. Tres puntos que saben a oro ante un Barakaldo que exigió al máximo hasta el último segundo.

Samanes desequilibra un duelo de alta intensidad en el Reino

Silvia García

Con el rugido constante de una grada entregada y bajo un cielo que se abrió justo antes del inicio, la Cultural Leonesa y el Barakaldo han protagonizado una primera mitad cargada de tensión, intensidad y fútbol directo. El marcador, al descanso, refleja la diferencia: 1-0 a favor del conjunto local gracias al tanto de un inspirado Samanes, cuyo impacto en el partido ha sido total.

Desde el primer minuto, con el campo rápido y traicionero por la humedad, la Cultural salió con ganas de imponer su ritmo. Samanes, clave en el dibujo de Raúl Llona, ocupó la banda izquierda y su presencia liberó a Luis Chacón para moverse con más soltura por el centro. Esa variación táctica pronto comenzó a dar frutos. En el minuto 6 ya se intuía la conexión con Chacón en una buena combinación, y al 7, su saque de esquina estuvo a punto de ser rematado con éxito por Satrústegui.

El Barakaldo lo intenta

Aunque el Barakaldo demostró desde el minuto 13 que no había venido de comparsa —Pedernales rozó el palo con un disparo lejano—, la Cultural mantenía el dominio territorial. Sin embargo, tras el minuto 20, las pulsaciones cayeron y el conjunto vasco comenzó a ganar metros, forzando a los leoneses a reagruparse. La grada no dejó de empujar, especialmente tras el susto que supuso ver a Satrústegui con un vendaje tras un golpe.

El gol

Y cuando más lo necesitaban los locales, llegó el momento que cambió el partido. En el minuto 29, Calderón encontró a Samanes con un pase al espacio, y el extremo, tras un desmarque impecable, definió con calidad para batir al portero rival. El Reino de León estalló. Era un gol con sabor a desahogo, el premio a una estructura mejorada con la posición natural de Chacón y la verticalidad de un Samanes en estado de gracia.

Más peligro a favor de la Cultu

El tanto dio alas a la Cultural. Bicho y el propio Samanes comenzaron a destacar en la creación de peligro, aunque el Barakaldo no bajó los brazos. La lesión de Maestre en el minuto 41 y su sustitución por Barri no alteró demasiado el plan local, pero sí marcó un final de parte más espeso, en el que Bañuz tuvo que intervenir para mantener la ventaja con una parada salvadora en el 43.

Así se llegó al descanso, con Magin animando desde la grada y una sensación clara: la Cultural ha sido más sólida que otras tardes, y gran parte de esa estabilidad nace en la banda izquierda, donde Samanes ha cambiado el guion del partido.

Han sido cientos de aficionados los que han acudido al Reino para tirar de su equipo...