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Intento de fuga de película de un preso en el hospital de León: cómplices que rociaron con gas pimienta a la Guardia Civil y armas desenfundadas

Los cómplices del interno, que había solicitado salir al hospital por una dolencia, esperaron la llegada del furgón de traslado y rociaron a los agentes de escolta con gas pimienta
Agentes de la Guardia Civil durante el traslado de un preso en una imagen de archivo.
Agentes de la Guardia Civil durante el traslado de un interno en una imagen de archivo.

Un interno de la prisión de León protagonizó este sábado un intento de fuga digno de una película de acción, en un suceso que puso en máxima alerta a las fuerzas de seguridad. 

Según informaron fuentes penitenciarias a Heraldo de León, el plan fue cuidadosamente trazado para ejecutarse durante una salida programada del recluso al Hospital de León.

El preso, cuya salida no había sido clasificada como de alto riesgo al tratarse de un interno "de confianza" ubicado en un módulo de respeto, era escoltado por un dispositivo habitual, sin refuerzos especiales. En situaciones de mayor peligrosidad, se habría dispuesto hasta de tres patrullas de apoyo de la Guardia Civil.

Ataque en el momento de la llegada

El intento de fuga se produjo en el mismo recinto hospitalario, tras el descenso del interno del furgón de traslado. En ese momento, dos hombres armados con sprays de gas pimienta atacaron por sorpresa a los agentes de escolta. 

El desconcierto inicial de los guardias permitió a los atacantes acercarse peligrosamente al recluso, aunque los agentes lograron mantener la situación bajo control.

Pese al uso del gas, los guardias civiles desenfundaron sus armas de servicio, aunque no realizaron disparos. La firme respuesta de los agentes, que llegaron a encañonar a los atacantes, logró finalmente que estos desistieran y huyeran del lugar.

En la misma acción resultaron afectados, según fuentes hospitalarias, dos técnicos sanitarios. Especialmente, uno de ellos, sobre el que se aplicó directamente el gas pimienta.

Reacción inmediata y búsqueda en marcha

Tras el incidente, se solicitó el refuerzo de más efectivos de la Guardia Civil, además del apoyo del personal de seguridad del Hospital de León. El interno fue devuelto inmediatamente al furgón de traslado y regresado a prisión.

Los agentes afectados fueron atendidos en el propio hospital por irritaciones derivadas del gas pimienta. Mientras tanto, continúa la búsqueda de los dos cómplices fugados, cuyo paradero todavía se desconoce.