La solidez de la Cultural le lleva a golear a un Zaragoza en autodestrucción
Dos 'dianas' de Manu Justo, un 'mordisco' de Chacón, la visión de Cortés y la complicidad de un rival perforado por sus problemas internos dibujaron este sábado una victoria contundente del equipo de ‘Cuco’ Ziganda ante un Zaragoza seriamente tocado.
El desenlace tuvo mucho que ver con la solidez de la Cultural, evidente, y también con el desquiciamiento de un Zaragoza que se puso la soga al cuello cuando cometió el único penalti del partido y la ajustó en el descanso, instante que aprovechó Paul para romper el monitor del VAR.
La segunda expulsión, fruto de una tontería sin precedentes en el fútbol profesional, fue la evidencia de la impotencia local ante una Cultural que hizo lo que tenía que hacer. Tocado y hundido el equipo local, el cuadro leonés liquidó el partido sin problemas.
Dominio Culturalista
El estreno de Emilio Larraz al frente del banquillo zaragocista no pudo tener un peor desenlace. Su equipo, en plena crisis de resultados y con la grada dividida, sufrió una derrota humillante (0-5) ante una Cultural que dominó el partido de principio a fin y evidenció la fragilidad mental y deportiva del conjunto maño.
El encuentro se disputó en un Ibercaja Estadio que pasó de la ilusión al enfado en apenas media hora. Los aficionados locales comenzaron con cánticos de apoyo, pero terminaron abucheando y abandonando el recinto antes del pitido final.
El partido, en tres claves
El debut de Emilio Larraz al frente del banquillo maño no pudo comenzar peor. Su equipo se vino abajo en cuanto llegaron las primeras adversidades. La expulsión de Sebastián en el minuto 38, que además supuso el penalti del 0-1, desató el caos. A partir de ahí, los jugadores perdieron la concentración y el control emocional: Paul fue expulsado en el descanso por una agresión al monitor del VAR, dejando al equipo con nueve. Con semejante escenario, el Zaragoza quedó a merced del rival.
El conjunto de ‘Cuco’ Ziganda ofreció un partido muy completo: serio en defensa, paciente con el balón y letal en ataque. Manu Justo firmó un doblete (uno de penalti y otro culminando una gran jugada colectiva), mientras que Chacón y Cortés brillaron con su calidad y lectura del juego. La Cultural controló los ritmos, castigó cada error local y supo mantener la cabeza fría incluso cuando el partido se enrareció.
La afición zaragocista fue testigo de un equipo sin rumbo ni referentes. Ni Toni Moya ni Francho lograron sostener el centro del campo, y la defensa se descompuso con facilidad. Las estadísticas lo reflejan: solo 6 disparos frente a los 19 de la Cultural, apenas un 42% de posesión y dos expulsiones absurdas. Sin temple ni organización, el Zaragoza terminó desbordado, mientras los leoneses convertían la tarde en una auténtica fiesta visitante.
Manu Justo y Chacón, verdugos en la primera mitad
Tras un arranque igualado, el choque cambió radicalmente en el minuto 38, cuando el defensa Sebastián cometió penalti sobre Manu Justo en un mano a mano. La acción supuso su segunda amarilla y expulsión, y el propio delantero leonés transformó la pena máxima con seguridad (0-1).
El Zaragoza, aturdido por el golpe, vio cómo la Cultural aprovechaba la superioridad numérica. En el minuto 48, Chacón firmó un golazo de falta directa, ajustando el balón a la escuadra izquierda de Andrada, que nada pudo hacer. Con el 0-2, el público maño estalló y la tensión se trasladó al túnel de vestuarios.
Paul, expulsado por agredir al VAR
El descanso no sirvió para calmar los ánimos. Antes del inicio de la segunda parte, el costamarfileño Paul perdió los nervios y asestó un puñetazo al monitor del VAR, dejándolo inutilizable. El árbitroreflejó el incidente en el acta y expulsó al jugador, dejando al Zaragoza con nueve hombres.
Con el rival en inferioridad, la Cultural se adueñó por completo del juego. En el minuto 51, Manu Justo repitió con el segundo en su cuenta particular tras una gran asistencia de Ojeda (0-3). Los leoneses, cómodos y precisos, movían el balón a placer ante un Zaragoza hundido moralmente.
Cortés cierra la goleada y la grada estalla
El festival continuó con el doblete de Cortés, que marcó en los minutos 74 y 87. Primero, rematando de volea a la escuadra tras un pase de Calero; después, recortando dentro del área para fusilar a Andrada en el palo corto. Los goles provocaron una desbandada en la grada, mientras los jugadores de la Cultural celebraban con su afición desplazada.
En los minutos finales, el portero local evitó un resultado aún más abultado con dobles paradas a disparos de Hinojo y Calero, pero la sensación de caos era total. La pitada final fue atronadora y la alegría en el vestuario local notable.
La Cultural duerme así fuera de los puestos de descenso tras un encuentro que se preveía tenso y que se resolvió del mejor modo posible.