"Gracias por devolverme la esperanza": un paciente elogia en una carta la humanidad del Hospital de León
“Quiero expresar mi más sincero agradecimiento a todo el equipo del Servicio de Vascular por la atención, el cuidado y la humanidad con los que fui tratado durante mi ingreso de tres meses”, escribe Ubaldo Fidalgo Díaz, paciente recientemente dado de alta del Complejo Asistencial Universitario de León, en una carta dirigida al equipo médico y personal del hospital.
Operado de un aneurisma que se complicó con una pancreatitis, Fidalgo pasó una larga y difícil estancia hospitalaria en la planta 11 del Edificio Princesa Sofía. Lejos de centrarse en el sufrimiento, ha querido destacar el acompañamiento, la profesionalidad y el trato humano recibido durante todo el proceso.
“Me sentí en las mejores manos”
“Han sido momentos muy difíciles para mí y para mi familia”, explica, “pero gracias a su profesionalidad, dedicación y calidez humana, me sentí acompañado y en las mejores manos en todo momento”. Sus palabras reflejan el impacto emocional de una atención sanitaria que va más allá de lo clínico, subrayando el valor de la empatía en el tratamiento hospitalario.
En su misiva, el paciente agradece de forma explícita no solo al personal médico, sino también a enfermeras, TCAEs, celadores y personal de limpieza, reconociendo que todos “demostraron un compromiso ejemplar con mi recuperación”.
Reconocimiento al trabajo en equipo
La carta, sencilla pero cargada de emoción, es un testimonio directo del agradecimiento que muchos pacientes sienten pero pocas veces pueden expresar. “No tengo palabras suficientes para agradecer el esfuerzo y la atención que me brindaron día tras día. Gracias a ustedes, hoy puedo seguir adelante con esperanza y gratitud”.
Este reconocimiento público resalta la labor del equipo del Servicio de Cirugía Vascular del Hospital de León, que día a día trabaja con profesionalidad y vocación para devolver la salud y la confianza a sus pacientes.
"Reciban un cordial saludo y mi eterno agradecimiento", concluye Fidalgo, dando voz a tantos otros que, como él, valoran profundamente el compromiso humano y médico del sistema sanitario público.
