La Junta recomienda el uso de mascarilla en hospitales y residencias, sin obligatoriedad
La Junta de Castilla y León no contempla establecer el uso obligatorio de la mascarilla ante la epidemia de gripe, si bien mantiene su recomendación “con cierta intensidad” en centros hospitalarios, residencias de personas vulnerables y si se mantiene contacto con enfermos de riesgo.
En la comparecencia posterior al Consejo de Gobierno, Fernández Carriedo aseguró que “efectivamente” hay que ser “muy precavido” en los centros sanitarios y sociales o cuando se trate de personas “especialmente vulnerables”, ya que reconoció la cepa del virus de la gripe que está circulando este año presenta “algún tipo de novedad” respecto de las “previsiones iniciales”.
Al alza en la comunidad
De acuerdo a la información de la Consejería de Sanidad, la tasa global de incidencia de infecciones respiratorias agudas continúa al alza en Castilla y León, pero aún se encuentra en niveles de intensidad bajos, con 893 casos por cada 100.000 habitantes, por encima de los 741 de los registrados en la semana anterior.
11% de los casos de urgencias
En concreto, la tasa de síndrome gripal asciende a 173 casos, ligeramente por encima de los 117 de los registrados en la última semana de noviembre. Entre el 1 y el 7 de diciembre, continuaron aumentando las urgencias hospitalarias por infecciones respiratorias agudas para todos los grupos de edad, y llegaron a representar el once por ciento de las urgencias. En el caso concreto de las hospitalizaciones aumentaron en mayores de 75 años.
Los virus de la gripe representaron el 50 por ciento de las muestras centinelas positivas y se detectaron en el 25 por ciento de las hospitalarias, mayoritariamente del subtipo H3. Por su parte, el virus respiratorio sincitial (VRS), que provoca bronquiolitis, ha aumentado ligeramente en menores de cinco años y en mayores de 65. Asimismo, la tasa de incidencia semanal ajustada por COVID 19 se fijó en dos casos por cada 100.000 habitantes.
La positividad en las muestras centinelas se situó en el 49,6 por ciento para las del virus de la gripe; en el 4,5 por ciento en los VRS, y en el uno por ciento en el COVID.