El toro bravo, más allá de la arena: ciencia, sostenibilidad y futuro para el vacuno de lidia
Castilla y León es tierra de toro bravo. Con casi 37.000 ejemplares repartidos en 167 explotaciones, la Comunidad se sitúa como segunda productora mundial de vacuno de lidia, sólo por detrás de Andalucía. Sin embargo, la reducción del censo en más del 20 % en la última década ha encendido las alarmas en el sector. Para revertir esta situación, la Junta ha reforzado su implicación con los ganaderos a través de proyectos de investigación, digitalización y apoyo técnico.
El director general del Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León (ITACyL), Rafael Sáez, ha sido el encargado de trasladar este compromiso institucional durante su visita a la finca ‘Pedraza de Yeltes’, en Castraz (Salamanca), una de las explotaciones más relevantes de la provincia. La ganadería, conocida por su trayectoria en los ruedos y su participación en proyectos de innovación, fue el escenario para analizar los retos de futuro del vacuno de lidia.
Investigación, bienestar animal y genética
Entre las principales líneas de trabajo impulsadas por el ITACyL figuran la mejora del sistema productivo, la valorización de la carne de lidia —rica en hierro y con bajo contenido en grasa—, y la conservación genética de una especie única ligada al ecosistema de la dehesa ibérica.
Estos trabajos forman parte de programas como ‘Innobravo’, centrado en la innovación en explotaciones de ganado bravo, o la Plataforma de Dinamización de Investigación e Innovación Agroalimentaria, que potencia la transferencia de conocimiento entre ganaderos, técnicos y científicos.
Además, se pone el foco en elementos fundamentales como el bienestar animal, el sistema extensivo y sostenible de explotación, y el papel ecológico y socioeconómico del toro de lidia: un animal que contribuye al mantenimiento de la biodiversidad y al arraigo poblacional en las zonas rurales más despobladas de la región.
Digitalización y formación para el futuro
La modernización del sector también pasa por la digitalización. Desde la Junta se impulsa el grupo de trabajo AKISCyL, centrado en vacuno de carne y lidia, que celebró esta semana su segunda sesión con expertos, ganaderos y técnicos del sector. En estas reuniones se han identificado las principales necesidades del sector en materia de formación, adaptación normativa y tecnologías para la gestión ganadera.
Entre las propuestas planteadas, destaca el desarrollo de herramientas digitales para el control sanitario, la gestión de datos productivos y la planificación estratégica en las explotaciones.
Pedraza de Yeltes: investigación y éxito en los ruedos
La finca ‘Pedraza de Yeltes’ no solo destaca por su modelo productivo mixto —con ganadería brava, mansa y porcino ibérico en un entorno de 700 hectáreas—, sino también por su proyección en el mundo taurino y su implicación en proyectos de investigación.
Su participación en ferias como San Isidro de Madrid, donde el toro ‘Brigadier’ fue premiado con la vuelta al ruedo, o la Feria de Hogueras de Alicante, con el ejemplar ‘Huracán’, avalan la calidad genética y el trabajo de selección de esta ganadería salmantina.
La visita del director del ITACyL ha servido también para reforzar la colaboración directa con estas explotaciones, consideradas aliadas estratégicas en la transferencia de conocimiento y en la puesta en valor de un sector que representa tradición, biodiversidad y desarrollo económico rural.
Una raza que defiende territorio y cultura
Lejos de los focos de la plaza, el toro de lidia encarna valores ecológicos, productivos y culturales que lo hacen especie clave para el equilibrio del medio rural. La Junta de Castilla y León, junto al sector ganadero, apuesta por un futuro en el que el toro bravo no solo sobreviva, sino que lidere la transformación sostenible de los sistemas ganaderos tradicionales.
