Un 12 de octubre más

Un 12 de octubre más, día de la Hispanidad y día de la Virgen del Pilar, Patrona de la Guardia Civil, de nuestra Guardia Civil, tan arraigada en la sociedad leonesa, como lo demuestra la cantidad de leoneses que han querido acompañar a la Benemérita en su día más importante que este año se ha celebrado en un entorno incomparable como lo es la plaza de San Marcos.
Hoy, más que ningún otro día, debemos homenajear a una de las instituciones más valoradas de nuestro país y que tanto significa en una provincia como la nuestra, predominantemente rural, cuidando de las gentes de nuestros pueblos que vertebra con su presencia y llevando seguridad a cada uno de los hogares que los conforman. Cada guardia civil que viste con honor su uniforme se sabe depositario de la tranquilidad de muchos de nosotros.
Con esta columna pretendo convertirme en la voz de tantos leoneses que, si tuvieran la oportunidad, demostrarían su cariño y su respeto a la entrega y dedicación al servicio de las personas que residen en nuestros pueblos.
La Guardia Civil asume la misión constitucional de protegernos a todos, garantizando con ello la paz social y la convivencia en democracia desde los ideales más nobles que impregnan su misión recogidos en su himno: vigor, firmeza y constancia, valor, lealtad y amor a nuestra patria.
Con esta columna pretendo convertirme en la voz de tantos leoneses que, si tuvieran la oportunidad, demostrarían su cariño y su respeto a la entrega y dedicación al servicio de las personas que residen en nuestros pueblos. Y más todavía en un año como éste en el que los incendios que han asolado León han puesto a prueba la resistencia de nuestras gentes bajo la atenta mirada de tantos de nuestros guardias que han compartido con los habitantes de nuestros pueblos aquellas jornadas interminables en las que el fuego lo devoraba todo “siempre fieles a su deber, serenos en el peligro, y desempeñando sus funciones con dignidad, prudencia y firmeza” tal y como les demanda el mandato que, en el lejano año 1845, les diera el Duque de Ahumada.
Nuestros guardias civiles han arropado y ayudado a los más desprotegidos para los que ha supuesto una pequeña luz en los peores momentos.
Ha sido un verano muy duro para León, porque mucha de nuestra gente ha sentido el zarpazo de aquellos fuegos inacabables que nos han puesto a prueba a todos, un infierno que se ha regodeado en nuestra falibilidad y que nos ha demostrado como son solo necesarios unos minutos para que pueda generarse la desolación más absoluta.
Y la Guardia Civil ha vivido esta desolación con nuestras gentes en primera persona, haciendo gala de su generosidad y entrega e intentando paliar este desastre en lo que ha podido. Nuestros guardias civiles han arropado y ayudado a los más desprotegidos para los que ha supuesto una pequeña luz en los peores momentos.
Su presencia en esta catástrofe, junto con la de otros cuerpos policiales, Ejército, Protección Civil, voluntarios, y todos los que ayudaron a las gentes de nuestros pueblos, encarna el compromiso más absoluto con los valores de nuestro Estado de Derecho por lo que hoy, el día de vuestra Patrona, la Virgen del Pilar, no puedo por más que, en nombre de tantos leoneses daros traslado de nuestra gratitud y apoyo.
Feliz Patrona, cuyo manto protector nos acompañe siempre.