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La Guardia Civil de Astorga honra a su patrona con emoción y tradición

El acto incluyó el izado de bandera, homenaje a los caídos y una misa en honor a la Virgen del Pilar; la comarca del Órbigo también celebró la festividad en Veguellina.

La Guardia Civil de Astorga celebró este domingo, 12 de octubre, coincidiendo con el Día de la Fiesta Nacional, los actos centrales en honor a su patrona, la Virgen del Pilar. La jornada reunió a autoridades municipales, militares, eclesiásticas y representantes de la Cámara de Comercio, así como a miembros de distintos colectivos y vecinos de la comarca, en un emotivo homenaje al compromiso y la vocación de servicio de la Benemérita.

Izado de bandera y homenaje a los caídos

Los actos comenzaron en el Acuartelamiento de la Guardia Civil de Astorga, donde tuvo lugar el tradicional izado de la bandera nacional y un sentido homenaje a los guardias civiles fallecidos en acto de servicio. La ceremonia, marcada por el respeto y el recuerdo, sirvió para reivindicar los valores de entrega, disciplina y lealtad que definen al Cuerpo desde su fundación.

Posteriormente, los asistentes se trasladaron a la Iglesia Parroquial de Rectivía, donde se celebró una misa en honor a la Virgen del Pilar y en memoria de los miembros del Instituto Armado ya fallecidos.

Convivencia y hermandad

Tras los actos oficiales, la jornada concluyó con un vino español en el que participantes y asistentes compartieron un momento de convivencia y hermandad, símbolo de la estrecha relación entre la Guardia Civil y la ciudadanía astorgana.

Celebraciones en la comarca del Órbigo

De forma paralela, la Guardia Civil de Veguellina de Órbigo conmemoró también la festividad del Pilar con la participación de representantes de los ayuntamientos de Hospital, Villarejo, Bustillo y San Cristóbal de la Polantera, que quisieron sumarse al homenaje y mostrar su apoyo a los agentes.

Ambas celebraciones reflejaron el orgullo, la cercanía y el espíritu de servicio que la Guardia Civil mantiene con las comunidades a las que protege, en una jornada que volvió a unir tradición, respeto y sentimiento.