170 funcionarios evaluarán los servicios de la Junta en León para mejorar su calidad
La Junta de Castilla y León ha puesto en marcha un ambicioso plan de evaluación interna de sus servicios en la provincia de León, que contará con la participación directa de casi 170 funcionarios. El objetivo es doble: detectar áreas de mejora y reconocer públicamente las que ya funcionan con excelencia.
La iniciativa fue presentada este lunes en la Delegación Territorial de León por el consejero de la Presidencia, Luis Miguel González Gago, acompañado por el delegado territorial, Eduardo Diego, la directora general de Atención al Ciudadano, Sonsoles Sánchez, y la secretaria general territorial, Ana María López.
“Quienes mejor conocen la administración son los propios empleados públicos. Por eso queremos que sean ellos los que evalúen cómo estamos funcionando”, afirmó Gago. Este sistema forma parte del Plan de Actuaciones de Calidad 2025, que incluirá cartas de servicios, grupos de innovación, campañas de encuestas ciudadanas y premios a la calidad.
Más de 160 preguntas y cinco meses para el diagnóstico
La evaluación incluirá 166 preguntas centradas en la gestión pública y afectará a todas las unidades administrativas excepto a las áreas de Educación y Sacyl. En León, hay aproximadamente 3.200 empleados públicos dependientes de la Junta, y de ellos un 65% son mujeres, por lo que los grupos de evaluación serán paritarios.
“Nos preguntamos por qué existe cada servicio, cómo se está actuando y en qué medida se están optimizando los recursos. No basta con funcionar: hay que hacerlo bien y ser útiles”, explicó el consejero. Los resultados de la autoevaluación estarán listos en un plazo de cinco meses.
Premios a la excelencia y encuestas ciudadanas
Además del análisis interno, la Junta lanzará una campaña de encuestas ciudadanas para conocer el grado de satisfacción de los usuarios con los servicios públicos. La Dirección General de Servicios coordinará este proceso, que también contempla la concesión de premios a las unidades que destaquen por su eficiencia y atención al ciudadano.
“Queremos cumplir con el derecho de los ciudadanos a una buena administración pública”, sostuvo González Gago. Y añadió que el grado de ejecución del último plan de calidad se situó en un 94%, lo que, según sus palabras, demuestra el compromiso con la mejora continua.
León, punto de partida del modelo
La provincia de León será el laboratorio de pruebas del nuevo modelo de calidad, que más adelante podría extenderse a otras provincias de la comunidad. La elección responde, según el consejero, “a una apuesta firme por mejorar desde dentro y con los recursos humanos más valiosos: nuestros empleados públicos, que son también ciudadanos y conocen bien lo que se puede hacer mejor”.
“Como Junta de Castilla y León no nos importa examinarnos para mejorar”, concluyó Gago, asegurando que esta nueva herramienta permitirá pasar de la improvisación a la planificación inteligente.