"Me dijeron que no llegaría a nada y ahora soy director en 'Edison Next Spain'"

A sus 46 años, el leonés Fernando Fernández Álvarez recuerda con claridad los días en los que le dijeron que no conseguiría estudiar una carrera. Su camino no fue el de un estudiante ejemplar, sino el de un joven que prefería la conversación y la risa a los libros. Pero su historia es una lección de perseverancia y de cómo encontrar el camino adecuado puede cambiarlo todo.
Desde la infancia, Fernando admite que el estudio nunca fue lo suyo. "Nunca se me dio muy bien estudiar, pero porque no me gustaba. Me aburría en clase, me lo pasaba bien charlando, riéndome, pero no estudiaba", cuenta. Pasó la mayor parte de su escolaridad aprobando "al trantrán", hasta que llegó a COU, donde las dificultades se multiplicaron.
"Me gustaban las asignaturas de ciencias, pero todo lo que tenía que ver con la literatura, los comentarios de texto, filosofía o inglés me parecía un suplicio", dice. Las malas notas lo llevaron a repetir curso y, con ello, llegaron también los comentarios desalentadores. "A mi madre le dijeron que algunos chicos valen para estudiar y otros no, y que yo era de los que no".
El punto de inflexión
Lejos de hundirlo, aquellos comentarios fueron un punto de inflexión. Fernando decidió demostrarse a sí mismo que podía superar cualquier obstáculo. Tras repetir COU y estudiar en el nocturno de Juan de la Encina, logró aprobar y entrar en la universidad. "Muchos amigos que habían entrado en ingeniería habían sido expulsados por no aprobar ninguna asignatura. Yo llegué un año tarde, pero con la determinación de hacerlo bien".
Y así fue. "Encontré el sitio donde me sentía a gusto y podía desarrollarme. Eso es clave", enfatiza. Pasó de ser un mal estudiante a aprobar con buenas calificaciones en Ingeniería Industrial. Sus propios padres no lo creían. "Mi padre iba a ver las actas porque no se creía que estuviera sacando notables y sobresalientes".
"Encontré el sitio donde me sentía a gusto y podía desarrollarme. Eso es clave"
Fernando culminó sus estudios como ingeniero técnico y posteriormente como ingeniero superior industrial en León. "Aprendí que no hay que basarse en lo que te dicen los demás, sino en lo que uno cree y en el esfuerzo que está dispuesto a hacer".
Despegue profesional en Madrid
Su trayectoria profesional lo llevó de trabajar en una empresa instaladora en León a Madrid, donde su carrera despegó. "Empecé en una empresa de ingeniería y luego tuve mi propio negocio, hasta que vi que el sector estaba bajando y decidí enfocarme en la eficiencia energética". Durante los últimos 15 años, ha trabajado en este campo, especializándose en alumbrado público y climatización para edificios.
Actualmente, es director en 'Edison Next Spain', una empresa del sector, y ha logrado consolidar su posición gracias a su esfuerzo. "En Madrid hay muchas oportunidades de crecimiento, pero hay que moverse y demostrar constantemente lo que vales", explica.
"Hace falta esfuerzo, sacrificio y creer en uno mismo"
Con una trayectoria que desmiente a aquellos que alguna vez dudaron de él, Fernando tiene claro el mensaje que quiere compartir: "Hace falta esfuerzo, sacrificio y creer en uno mismo. En los primeros años de mi carrera trabajé intensamente para posicionarme, y una vez que logras eso, es difícil que caigas, salvo que cometas un error grave".
Fernando es la prueba de que la perseverancia y la pasión por lo que uno hace pueden cambiar cualquier destino. "Uno tiene que encontrar su camino y esforzarse en él. No importa lo que digan los demás, sino lo que estés dispuesto a hacer para lograrlo".