Una revista internacional destaca una investigación de la ULE sobre la caza
La revista internacional de acceso abierto e interdisciplinar ‘Animals’ ha publicado en su número de noviembre un estudio titulado ‘De la eliminación al control selectivo: Perspectivas sobre la gestión de la depredación en los cotos de caza españoles’, en el que ha participado el profesor E. Jorge Tizado, del Departamento de Biodiversidad y Gestión Ambiental de la Universidad de León (ULE), además de varios miembros de la Fundación Artemisa.
El trabajo ha explorado las regulaciones actuales, tanto la normativa autonómica como la utilización real de los métodos de control de depredadores en 16 regiones autonómicas españolas, así como las características de gestión a nivel de cotos de caza, utilizando datos de 373 cuestionarios.
Evolución histórica del control de depredadores
Hasta la década de 1970, -explica el texto-, la mayoría de los depredadores eran percibidos como alimañas; por lo tanto, se realizaron esfuerzos significativos para eliminar tanto a los depredadores oportunistas como a los especialistas mediante métodos no selectivos y masivos, como el uso de veneno y trampas mortíferas que estaban permitidas e incluso financiadas con fondos públicos.
La situación comenzó a cambiar con la publicación de acuerdos internacionales y europeos sobre conservación de la naturaleza y la vida silvestre. El proceso finalizó en 2007, con la Ley 42/2007 del Patrimonio Natural y la Biodiversidad, seguida de la publicación de las directrices para el control de depredadores, que incluían dos puntos clave: el permiso de uso de métodos de contención que superen los estándares internacionales de trampeo y la regulación de la formación necesaria para obtener la cualificación de especialista en control de depredadores. En la actualidad, tras la aplicación de los acuerdos y regulaciones internacionales, el control de depredadores se lleva a cabo utilizando métodos selectivos y no masivos.
El estudio en el que ha participado el profesor de la ULE E. Jorge Tizado confirma que la caza sigue siendo el método más extendido para el control de estas especies, autorizado en todas las comunidades autónomas. Sin embargo, en diez de ellas también se permite la utilización de métodos de retención homologados, que incluyen distintos lazos para el zorro y las cajas-trampa para córvidos.
Recomendaciones del estudio
Como principales conclusiones, los autores del estudio indican que se deberían aprobar regulaciones específicas en todas las regiones como forma de promover la profesionalización del control de depredadores y el uso de trampas de contención homologadas no sólo en terrenos de caza, sino también en áreas donde las especies protegidas se ven afectadas negativamente por la presencia de depredadores generalistas.
Los gatos asilvestrados se relacionan con la extinción de 63 especies de vertebrados en todo el mundo. En España, en los ecosistemas insulares han estado involucrados en el 14 por ciento de todas las extinciones de aves, mamíferos y reptiles y en el declive del 8% de los mismos catalogados en peligro crítico.
A este respecto, el estudio afirma que, “existe una necesidad urgente de facilitar el control de los gatos asilvestrados o callejeros mediante métodos selectivos y sin sacrificio, ya que no pueden considerarse una especie protegida en cotos de caza ni en áreas naturales”.
Cazadores y cotos
Se estima que en España hay 577 742 cazadores y 32 500 cotos de caza, que ocupan 43 millones de hectáreas (85 por ciento del territorio). En este contexto, el control de depredadores se ha llevado a cabo históricamente como parte de la gestión cinegética, tanto de especies de caza mayor como menor. De la revisión anual de las estadísticas forestales, que abarca la temporada de caza 2022-2023, las cifras de caza fueron de 186 283 zorros, 443 714 jabalíes y 275 770 córvidos.
La comunidad de depredadores es diversa e incluye superdepredadores que se han ido recuperando en los últimos tiempos, como el águila imperial ibérica (Aquila adalberti) y el lince ibérico (Lynx pardinus), junto con una amplia variedad de rapaces, mamíferos de diferentes tamaños (incluidos cánidos, félidos, mustélidos, vivérridos y roedores), y reptiles.
En esta lista de depredadores, -se apunta-, también deberían incluirse los gatos callejeros (Felis catus) y los perros (Canis familiaris). Por lo tanto, la comunidad de depredadores presente en muchos cotos de caza españoles puede consistir en depredadores especialistas y oportunistas, especies antropófilas salvajes (zorro y urraca) y especies domésticas/callejeras, junto con depredadores exóticos”.