"El Bierzo no puede ser el vertedero industrial de España"
Elena de la Puente, portavoz de Bierzo Aire Limpio, denuncia la pasividad de las administraciones y defiende la necesidad de un modelo sostenible frente al expolio de recursos, la contaminación y los macroproyectos energéticos.

Visitamos a Elena de la Puente. Esta mujer comprometida encabeza la asociación “Bierzo Aire Limpio”, cuyos miembros han estado al pie del cañón participando activamente en la extinción de los incendios que han asolado recientemente la provincia de León.
Elena, te agradeceríamos una breve semblanza de la asociación a la que perteneces. Cuándo nace y el detonante o catalizador que motiva su aparición.
Bierzo Aire Limpio es una asociación sin ánimo de lucro, cuyo objeto social (artículo 1º de nuestros estatutos) es: “Realizar cuantas iniciativas se consideran oportunas para preservar, potenciar y proteger el medio natural del Bierzo, su desarrollo sostenible, la protección de la salud y aquellas otras que, fuera de este ámbito territorial, se consideran de indudable interés medioambiental”
La protección de la salud de la ciudadanía es una necesidad en ocasiones olvidada por las administraciones, que requiere ser tutelada por asociaciones como la nuestra. Pongo como ejemplo la nota de prensa de Bierzo Aire Limpio del 12 de agosto pasado exigiendo que se informara sobre las medidas de protección ante el humo de los incendios e información real sobre la calidad del aire: fue justo dos horas después de nuestra nota, y no antes, que el ayuntamiento de Ponferrada se hace eco y publica un bando anunciando recomendaciones como el uso de la mascarilla para proteger la salud de las personas. Este ejemplo, lamentablemente, no es anecdótico.
La asociación surge, precisamente, cuando la cementera de Toral de los Vados, perteneciente a la multinacional brasileña Votorantim, anuncia en 2008 su intención de incrementar su cuenta de beneficios a costa de ampliar el abanico de residuos que pretende incinerar, concretamente, anuncia su intención de incinerar neumáticos fuera de uso. Recordemos la ubicación de la cementera, a escasos metros de las viviendas y, además, en el fondo de lo que denominamos la Hoya del Bierzo, rodeada por una orla montañosa que dificulta de manera extraordinaria la ventilación de la contaminación. Para que nos hagamos una idea de la situación, las estaciones de control de la calidad del aire asociadas a esta industria están situadas de manera inadecuada, ya que se han colocado en la zona de entrada de los vientos dominantes en lugar de situarse en la dirección hacia la que estos soplan. Esta ubicación impide obtener una medición realista del impacto de las emisiones sobre la población y el entorno receptor.
Para finalizar esta breve semblanza introductoria, quisiera señalar que Bierzo Aire Limpio no recibe ninguna subvención o ayuda pública y está compuesta por personas que regalan su tiempo, conocimientos y esfuerzos de manera voluntaria en la defensa ecológica del Bierzo y las personas que lo habitan.
Qué logros habéis conseguidos en la protección de espacios. Señálanos los principales hitos.
“Cementos Cosmos” Toral de los Vados, incineración de 33.000 Tm/año de neumáticos y otros residuos que conseguimos paralizar durante 10 años, desde la movilización de 8000 personas, desde 2011. Tras esa movilización, el permiso para coincinerar neumáticos y otros residuos fue denegado. También el recurso contencioso administrativo presentado junto a otras entidades ante el TSJ de CyL contra la autorización ambiental concedida fue declarado ilegal. Recientemente, hemos ganado la sentencia para evitar el uso del orujillo de aceituna, reconocido tóxico cancerígeno, que la Junta de CyL había autorizado tras petición de la cementera. Hemos tenido otras sentencias, sin embargo, que no nos han sido tan favorables.
“Planta de residuos Aqualdre Zinc”: El Bayo, Cubillos: 144.000 Tm/año (Residuos metalúrgicos, procedentes principalmente de las acerías: Zinc, cadmio, plomo, cromo, cobalto, níquel, molibdeno, antimonio…) Ante la presión social y judicial el proyecto fue paralizado.
“Macro vertedero de Matachana” Almázcara: 125.000 Tm/año (Residuos animales, residuos farmacéuticos, residuos alimentarios, lodos de depuradora…) Ante la presión social la empresa promotora abandonó el proyecto.
“Central Térmica Forestalia” El Bayo, Cubillos del Sil: 350.000 toneladas año de residuos de origen forestal, de la industria de la madera y de la agricultura, para funcionar durante 7.500 horas al año, 50 camiones diarios. En estos momentos, tras apenas cuatro años desde su puesta en marcha, ha quedado en evidencia su nula viabilidad.
42 proyectos energéticos denegados en los últimos tres años.
- Mal diseñados, inasumibles para este territorio, pretendían arrasar con la biodiversidad de la comarca y las formas de vida de sus habitantes.
- A continuación, paso una relación no exhaustiva de los proyectos frenados por la presión social, las alegaciones y la acción jurídica:
- Parques eólicos (PE) casi 200 aerogeneradores: PE Alto Bierzo Sil, PE Oencia, PE Acario, PE Tureno, PE La Frontera, PE Busmayor, PE Barjas, PE Trabadelo, PE Eco, PE Ralea, PE Umbrío, PE La Espina, PE Alto Las Eras, PE Manjarín, PE Molinaseca.
- Proyectos en La Cabrera (afectados por líneas de evacuación que cruzaban el Bierzo): PE Cabrera, PE Anémide, PE Corporales, PE Pichi, PE Lardeiras, PE Veleta, PE Isidoro, PE Abecé.
- Proyectos fotovoltaicos (FV): FV Edora: Compas I, Compas II, Compostilla I, II, III y IV; FV Capital Energy: Lirio, Formosa, Colibrí, Atenea; FV Tayan Energy: Aton Energy, Inti Energy, Apolo Energy, Baal Energy
- FV Maragato y FV Somoza Solar (con evacuación cruzando los Aquilianos)
• En el Bierzo se siguen tramitando los proyectos eólicos, de bombeo y fotovoltaicos de Victorino Alonso y Viloria
- Otros proyectos: Biogás Castropodame (tumbado por más de 6000 alegaciones), Grineo (pseudo reciclaje de palas eólicas, a la que la propia empresa renunció, gracias a la presión social), Proyecto de Amoniaco e Hidrógeno Verde en San Román de Bembibre… también han caído, algunos porque era obvia su inviabilidad. Aun así, no deja de sorprender que salieran a información pública.
- También merecen especial mención las dos sentencias (de 2020 y recientemente, de 2025) que anulan las autorizaciones concedidas a la central de calor de Ponferrada, historia que describimos en nuestra página web y merece una lectura detenida.
¿Cómo veis, en general, a las administraciones en la defensa del medio ambiente? Priman, como parece, los intereses económicos, o hay un respeto a las figuras de protección y a los estudios de impacto.
Priman los intereses económicos y la especulación disfrazados de progreso y empleo. No es la primera ni será la última ocasión en la que tendremos que escuchar que los puestos de trabajo que tal industria asegura que va a crear justifican una autorización que pone en riesgo, incluso, la seguridad de las personas. Luego, con los puestos de trabajo, funciona el “si te he visto no me acuerdo” con una facilidad pasmosa. Con los macroproyectos energéticos se ha vendido, por ejemplo, la creación de puestos de trabajo, falacia que año tras año se demuestra que no es cierta, dado que los puestos reales son totalmente temporales, durante la fase de construcción, de apenas unos meses. Eso no resuelve nada. Además, en un entorno de necesidad es muy sencillo jugar con la desesperación de las personas.
Por otro lado, nos llama la atención que hayan salido a información pública algunos proyectos que, de haber sido revisados con rigor por la administración competente, nunca debieron salir a la luz, como aquel salto hidroeléctrico de Tremor que, en un ejercicio de corta-pega o quizá partiendo del desconocimiento de unas nociones básicas de geografía provincial, ubicaba el río Cabrera nada menos que en el otro extremo de nuestra comarca.
Acerca del impacto medioambiental. Es algo de lo que se habla, pero parece haber una cierta ignorancia… normalmente qué valores se bareman. ¿Se tiene en cuenta a los pobladores humanos?
Se tiene en cuenta aquello que asegura el Estudio de Impacto Ambiental que presenta la empresa promotora. Si hay errores, que los hay con excesiva frecuencia, y nadie está allí para exponerlos a través de los espacios de participación pública, es muy probable que se le dé de paso y reciba autorización. En muchas ocasiones, a pesar de nuestras alegaciones, elaboradas por personas científicas con conocimientos profundos en la materia, se conceden las autorizaciones. Tenemos montones de ejemplos: la cementera de Toral de los Vados es de los más emblemáticos, llevamos años solicitando un estudio toxicológico y epidemiológico de las enfermedades oncológica, respiratoria y cardíaca y solo hemos obtenido un panfleto de apenas seis páginas sin rigor científico; pero tenemos otros ejemplos, como el vertedero de San Justo de la Vega, la autorización para “reciclar” baterías de litio en Cubillos del Sil…
Al principio hablaba de independencia y voluntariado. Lo que hace que algunos miren de reojo al ecologismo no es tanto la defensa de una especie o un paisaje, sino los valores subyacentes, que ponen en peligro esta realidad alienada que se ha levantado en beneficio de una minoría con la máxima de la obtención del mayor beneficio posible, que resulta insostenible para el planeta y que necesita un nivel de alienación colectivo que los valores humanos que alientan al ecologismo ponen en evidencia.
En León parece claro que hay una política sostenida de expolio de recursos: territorio, sol, viento y agua.
… y uso de la provincia como vertedero industrial. No olvidemos esto último porque tiene especial relevancia, creo yo. ¿Por qué somos diana de empresas que pretenden convertirnos en vertedero de residuos que aspiran a venir desde lugares tan alejados?
Pero volviendo al expolio de los recursos, que nos ha dejado las cicatrices sin curar de la minería, un paisaje profundamente fragmentado, concentración de líneas de alta tensión e infraestructuras eléctricas, que parecen condicionar también nuestro futuro y parece que arrastramos a las comarcas de nuestro entorno, por no hablar de la enorme cantidad de expropiaciones… En líneas generales, se permitió hacer de todo, no hubo restauración ni justicia ambiental y ahora, en plena espiral del todo vale en defensa del interés general, esta inercia del pasado parece ser imposible de frenar…salvo que digamos a una: ya está bien, porque el péndulo de la injusticia ambiental ya ha estado en un extremo, se nos debe el equilibrio, al menos, ya no pedimos que el péndulo se quede durante un tiempo en el otro lado.
¿Pensáis que se ha “prostituido” el espíritu de la Agenda 2030 en función de la producción de renovables a toda costa?
Es que del espíritu y la razón de ser con la que se contempla al abuso que estamos viviendo la distancia es sideral. Cualquiera puede contratar a una ingeniería que desarrolle un proyecto. La ingeniería desarrolla el proyecto desde la otra punta del país. La promotora lo paga y lo pone a “rular”, iniciando los trámites ante la administración competente, y ésta la saca a información pública. Hemos vivido situaciones inconcebibles en las que el exceso de proyectos ha saturado la página de acceso a la información sobre proyectos. No es aceptable.
Por otro lado, nos toca plantearnos para qué tanta producción energética. Ramón Carnicer lo decía hace más de 30 años: “a nuestra provincia la quieren solamente por la energía que produce”. Esta provincia produce energía a gran escala, pero vive con pobreza estructural. Se cerraron las térmicas, que producían 1 GW y medio aproximadamente, y se inicia la locura de la supuesta transición justa, con un despliegue propuesto para esta zona de unos 6 GW. Algunos proyectos iban solapados sobre otros. Aerogeneradores de una empresa propuestos sobre aerogeneradores de otra diferente… y los lugares escogidos… de risa. Los de mayor biodiversidad, sobre captaciones de agua, o aquel que pretendía hincar la estructura de unos paneles fotovoltaicos sobre un vertedero ilegal sellado. Tenemos para contar un libro sobre el despliegue de proyectos absurdos.
¿Qué opináis sobre los aprovechamientos de biomasa? ¿Son necesarios? ¿Son un negocio redondo? Se entiende que las masas provenientes de talas o incendios deberían aprovecharse “in situ”.
El negocio de la biomasa es un espejismo. Pongamos como ejemplo la central de generación de electricidad por biomasa de Cubillos del Sil. Tras 4 años de actividad, no es viable sin subvenciones públicas. Se trata de otro ejemplo más de cómo se ha montado un negocio que socializa los gastos y privatiza los beneficios. No sólo es que se construyera con fondos públicos, sino que exige primas a la generación de 70 euros por tonelada de biomasa incinerada, muy superiores a las valoradas por el Estado (que solo admite 56 euros/tm). Su funcionamiento depende de enormes extensiones forestales: 150 km a la redonda — dos tercios de Galicia, casi todo Asturias, la provincia de León al completo y buena parte de Zamora. Para finalizar, consume combustibles fósiles en todas sus etapas logísticas: Excavadoras, procesadoras, tractores, transporte… pero se empeñan en vendernos que eso es sostenible. En estos días observamos el camino que llevan los árboles talados por culpa de los incendios… ya sabes.
Se habla mucho de los famosos 30 años de imposibilidad de cambio de uso en terrenos incendiados… la reforma de 2015 y ”la necesidad imperativa” que permitiría ese cambio. ¿Qué hay de cierto?
El tema está regulado en el artículo 50 de la ley de montes. El artículo 50 de la Ley 43/2003, de Montes, en su versión modificada en 2015, fija un régimen restrictivo con el fin de garantizar la recuperación ambiental de las áreas devastadas por el fuego. Entre las principales medidas destacan: Prohibición del cambio de uso forestal durante un mínimo de 30 años. Imposibilidad de realizar actividades incompatibles con la regeneración natural de la cubierta vegetal en los plazos que determine la normativa de la CC.AA. en cuestión. Obligación de las CC.AA. de implementar planes de restauración, que incluyen la retirada de madera calcinada y la reforestación. Acotamiento de los aprovechamientos durante, al menos, un año, salvo autorización expresa de la administración competente.
También hay contempladas unas excepciones a este régimen general: Instrumentos de planeamiento previos al incendio, cuando la recalificación ya estuviera contemplada en planes aprobados o en trámite, con evaluación ambiental favorable. Razones imperiosas de interés público de primer orden: las CC.AA., y en algunos casos el Estado, pueden permitir el cambio de uso mediante una norma con rango de ley, siempre que se adopten medidas compensatorias, como la recuperación de una superficie forestal equivalente. Montes catalogados: en estos espacios protegidos la prohibición es absoluta, sin posibilidad de excepción.
En definitiva: la obligación principal es restaurar y proteger el entorno forestal. Las excepciones son tasadas y necesitan de la aprobación de una ley.
En cuanto a las instalaciones de energías renovables, el incendio no afecta a las posibilidades de instalación, son las mismas y requieren de la declaración de utilidad pública que ya hemos visto que es casi automática.
Otra cosa es que en áreas que no cuenten con alguna figura de protección (ej. red natura, zonas Zepa, montes de utilidad pública… etc.) el incendio facilite las declaraciones de impacto ambiental favorable.
Y ya hemos explicado anteriormente de qué manera se hacen los estudios de impacto ambiental…
¿Qué opináis sobre la nueva normativa de la Junta de Castilla y León, salida en caliente en este mes de agosto? ¿Qué perjuicios y “agujeros” legales veis?
Nos preocupa sobremanera que no se haga mención a la restauración de los suelos, que se confundan cultivos con bosques, que las administraciones no muestren preocupación sobre el cuidado hidrológico y la recuperación del suelo, que son esenciales.
Parece claro que necesitamos cambiar el paradigma en la política forestal. Danos cuatro ideas sobre esto: silvicultura, ganadería, repoblación…
Me cuesta dar una opinión en esta pregunta porque creo que son las personas científicas las que deben hablar, y con su asesoramiento, debemos actuar, pero sí me gustaría mencionar algunas cuestiones que me preocupan cuando se habla del “cambio de paradigma”: por un lado, escucho hablar del monte desde la concepción eminentemente economicista, pero el monte es mucho más que eso, es biodiversidad, en nuestra provincia riquísima, son servicios ecosistémicos. También se habla indistintamente de cultivos y de ecosistemas y no son lo mismo y no deben recibir el mismo trato. Me preocupa que el “cambio de paradigma” sea un más de lo mismo, que es el principal relato que escucho en estos días. En el Bierzo tenemos numerosísimas plantaciones de eucaliptos, especie pirófita por excelencia, que se plantaron principalmente para alimentar los hornos de las centrales de biomasa. Todavía no he escuchado a nadie hablar sobre la necesidad de restringir estas plantaciones.
Si lo que queremos es reducir o evitar catástrofes como la del mes de agosto, el “cambio de paradigma” debería empezar por tratar asuntos que no se están tratando. Muchos de los incendios de este verano fueron provocados por rayos, pero una gran mayoría se debieron a actuaciones negligentes o intencionadas de personas, por lo tanto, parece lógico pensar que hace falta más inversión en vigilancia, guardas en nuestros montes, incentivos para los equipos de extinción por menor número de incendios y estabilidad laboral. También creación de puestos de trabajo en prevención, erradicar la privatización del servicio de extinción de incendios, que es un servicio público que debe ofrecer las máximas garantías. Por otro lado estamos olvidando que alguien debiera llevar el timón cuando se permite plantar especies pirófitas. En general, las medidas que he escuchado por parte de la administración se centran en propuestas similares a las que nos han traído aquí hoy, pero no veo voluntad de cambio.
Querríamos conocer vuestra impresión sobre la despoblación. ¿Qué políticas de repoblación veis posibles? Háblanos, por favor, del desistimiento en las actividades ligadas a los montes, que parece un problema demográfico y también político. ¿Van a desaparecer los pueblos?
Las administraciones se llenan la boca con los conceptos de ayuda al medio rural y mil frases que no tienen contenido, totalmente vacías. Son expertas, como dice un buen amigo, en expresar “la nada rodeada de palabras”. La situación es que la población rural se está yendo de los pueblos a las ciudades porque cada día es más complejo vivir en el pueblo: el consultorio médico que antes atendía una vez a la semana dejó de hacerlo; tienes que hacer mil documentos para poder mantener tu humilde negocio de turismo rural; los paneles fotovoltaicos que pusiste para autoconsumo (más habituales en los pueblos) son un sindios de documentación a aportar y aplicativos informáticos que nadie entiende; hacer la vendimia tradicional es una aventura y está vigilado por la inspección de trabajo, amén de la inmensa cantidad de aplicaciones que debes rellenar para recoger 1700 kg de uva…la gente está agotada de tener que hacer mil papeleos para “legalizar” a las seis gallinas de autoconsumo. ¿Qué el rural pierde población? Claro, cómo no. El proyecto de vida de ir a vivir al pueblo no es precisamente esa realidad a la que nos obligan.
Hablando de políticos… Mañueco, Quiñones, Arranz. Aparte de soberbia y cobardía, ¿incompetencia y falta de transparencia.
En el Bierzo llevamos tiempo observando el desprecio con el que se nos trata desde la administración autonómica: el “chiste” de Mañueco ante la pregunta de la prensa sobre su opinión acerca del reconocimiento del Estado Palestino, y responder con sorna “Buff, de la comarca de El Bierzo”, es una falta de respeto, pero expresado por el máximo responsable de nuestra comunidad autónoma, denota mucho más que eso. De ahí se traduce una política que, claramente, no nos favorece ni nos tiene en cuenta. Del desaparecido consejero de medio ambiente, o del presumible responsable de medio natural de una comunidad autónoma lo esperable no son esos comportamientos. Es algo que sigo sin entender, no me cabe en la cabeza que una PERSONA trate con ese desprecio a los habitantes de una parte de la CCAA.
Por otro lado, la administración autonómica da muestras también de otras formas de burla y desprecio, por ejemplo, está vulnerando de manera reiterada el derecho de las asociaciones ambientales a participar en los procesos que nos conciernen. No recibimos respuesta cuando solicitamos información ambiental, derecho reconocido por los tratados internacionales y nacionales, que avalan la necesidad de darnos respuesta en el plazo de un mes. Se trata de una realidad que es necesario denunciar por preocupante. Con el silencio se nos deniega el derecho a conocer, analizar y contrastar información de carácter ambiental, alguna afecta a la salud de las personas…
¿Dónde entendéis que se han producido las mayores y más graves negligencias?
Con la gestión de los incendios hay mucho que contar. Por un lado, hemos sentido el abandono por parte de unas administraciones que han permitido que nuestra comarca, la provincia, pero también otras zonas, se calcinen ¡durante más de un mes! No hablamos de un momento anecdótico, sino de una serie de errores encadenados que han incrementado las consecuencias de una catástrofe humana, económica y ambiental y que esta tenga unas magnitudes inmensas. Las condiciones laborales de los bomberos forestales, terribles, con jornadas interminables de 12-14 horas, producto de la privatización. Tuve oportunidad de hablar con muchos bomberos voluntarios que acudieron desde numerosos lugares y todos se echaban las manos a la cabeza por las condiciones en las que se estaba trabajando aquí. Pero la situación de estos profesionales la pueden concretar mejor otras personas.
Aquí nos encontramos con que el monumento natural de Las Médulas enfrentó el fuego con un plan caducado desde 2022, escasas inversiones en prevención y vigilancia, a pesar de recibir importantes ayudas estatales para luchar contra los incendios, descoordinación por parte de la Junta de Castilla y León , que incluso ignoró peticiones de agentes forestales para volver antes de vacaciones cuando comenzó la emergencia, dificultades insalvables para que los bomberos voluntarios pudieran integrase en los operativos…. Quizá una de las cuestiones más llamativas es la forma en la que el consejero de medio ambiente intentó minimizar el problema disculpando su ausencia en medio de la catástrofe, cuando había ya personas desalojadas, argumentando que “tenía la mala costumbre de comer”. Si alguien estaba informado al minuto de lo que estaba ocurriendo en esos momentos, era él, sin embargo, decidió ocultarse tras un mensaje mísero, ausente de empatía ante la desgracia ajena, que opino fue un intento desesperado, pero también ridículo y falto de humanidad por su parte, que fue, además, inicio de una cadena de mentiras (negar en rueda de prensa que el emblema de Las Médulas, el Mirador de Orellán, no se había calcinado cuando así había sido) destinadas a intentar no perder el control. Nunca tuvo el control… y hablamos de un periodo que superó el mes.
Pero es que ya supera la negligencia lo ocurrido hace unos días en Sobrado, tras declarar la alerta extrema por incendios y no tener operativo disponible para atajar la emergencia. Pienso que el concepto jurídico del que debemos hablar en este caso es dolo.
¿Habéis traspasado las “fronteras” de El Bierzo y colaboráis en otras zonas? ¿Dónde?
La asociación tiene una trayectoria extensa y ello nos permite dirigirnos a otros colectivos sin complejos y con la humildad y el respeto que se merece la defensa de otros territorios. Hemos colaborado con colectivos de todo el Estado, integramos varias alianzas nacionales e internacionales, somos cofundadores de la coordinadora estatal contra la incineración, por ejemplo, (la declaración de Ponferrada contra la incineración, producto del encuentro celebrado aquí, con la presencia destacada de Paul Connett) también colaboramos con Aliente, formamos parte del Fondo para la Defensa Jurídica de la Cordillera Cantábrica, y compartimos experiencias con otras plataformas más cercanas, como la Coordinadora de Léon, Salvemos Nuestro Bierzo... Nuestra experiencia es de utilidad en otros puntos del Estado, al igual que la de otras compañeras nos aporta y enriquece aquí. Además, somos personas con muchas inquietudes también y, estamos presentes en muchos más espacios de los que habitualmente piensa la gente.
Por otro lado, lamentablemente, somos referente nacional e internacional, cuando se habla del SLAPP (Strategic Lawsuit Against Public Participation), o lo que es lo mismo, pleitos presentados por multinacionales contra las personas que integran los colectivos ecologistas cuyo único objetivo es intimidar. Nuestra historia sale en internet cuando haces la búsqueda: la historia del gigante brasileño Votorantim (antes Cosmos) contra la modesta asociación ecologista que solo reivindica que la calidad del aire debe ser tutelada con rigor, porque en ello nos va nuestra salud. El SLAPP sufrido por la junta directiva de Bierzo Aire Limpio, que finalizó con el archivo de la causa, como no podía ser de otro modo, ha propiciado que muchas personas y asociaciones de los lugares más inverosímiles contactaran con nosotras.
Ha nacido la Plataforma Stop Incendios Noroeste. ¿En qué ámbito y por qué motivo?
Los incendios forestales de este verano son de una dimensión tal, que no podíamos obviar que se trata de una catástrofe ambiental, económica, social y humana. Concebir la reivindicación, la asunción de responsabilidades y exigir la recuperación del territorio exigía de la unión de muchos colectivos que engloban no solamente el ecologismo, sino a toda la ciudadanía. De ahí surge la “Plataforma Ciudadana Stop Incendios del Noroeste Peninsular”. Es un proyecto en el que muchas asociaciones y colectivos como Bierzo Aire Limpio han puesto al servicio del conjunto una infraestructura humana, experiencia jurídica y medios a su alcance para recorrer un camino muy largo, porque estos daños y sus consecuencias han venido para quedarse mucho tiempo. Avanzamos despacio, crecemos, vamos definiendo objetivos… un camino bello, el de la reconstrucción, que merece la pena recorrer.
Formula tres deseos en este terreno.
Planteo tres deseos, aunque son bastante genéricos:
1-Respeto por los derechos que tantos años ha costado alcanzar; 2-justicia social y ambiental, especialmente con aquellos territorios que más han entregado en pro de un supuesto progreso que nunca nos ha revertido y solo nos trae más propuestas de lo mismo; 3- recuperación de ese grado de humanidad que se pierde a pasos agigantados entre las grietas de una polarización, que sirve como disculpa de casi todo, frente a la arrogancia política para no reconocer los errores y asumir sus responsabilidades y contra el culpar por sistema a los demás de todo lo que ocurre (antes a eso lo llamábamos tirar balones fuera, parece mentira que hoy esa estrategia futbolera sea la única respuesta frente a la elegancia de asumir los errores con decencia y responsabilidad). Nuestra clase política ha perdido la capacidad de mirarnos a los ojos y dialogar.
Si me permites, me gustaría cerrar con un agradecimiento, porque no puede ser de otra manera:
Gracias a todas esas personas que trabajáis de manera voluntaria por defender el territorio, gracias especiales a esas personas procedentes del mundo de la ciencia que nos enriquecéis con vuestro conocimiento, gracias a quienes reivindicáis cada día lo que creíamos ya conseguido y asentado, y, por supuesto, gracias, Heraldo de León, por escucharnos, por dedicarnos estos minutos y darnos altavoz. ¡Gracias!
Elena de la Puente intervendrá en el acto “León nos necesita”, que se celebrará en el Auditorio Ciudad de León el martes 7 de octubre a las 19:00 horas.