Olegario Ramón denuncia que la Junta "no apuesta" como debería por el Consejo Comarcal

El presidente del Consejo Comarcal del Bierzo, Olegario Ramón, cree que la Junta de Castilla y León “no apuesta” de verdad por esta institución y que su creación, así como la Ley de la Comarca del Bierzo, se hizo solo para frenar los sentimientos ‘leonesistas’ que afloraban en la provincia. Así lo manifiesta en una entrevista que publica en su edición de hoy el periódico la La Nueva Crónica.

En esas líneas, Ramón se muestra sorprendido de todo lo que el Consejo Comarcal hace con un presupuesto tan bajo, algo que desconocía antes de ser presidente. En su opinión, a pesar de que el Gobierno autonómico no apuesta por él -ejemplo de ello es el retraso de la firma de nuevo convenio-, se atiende a un elevado número de personas gracias a servicios como el Centro de Atención a Drogodependientes. el de menores, el Banco de Tierras o el Servicio de Asistencia a Municipios, SAM. 

"Queda mucho por hacer"

Añade que en estos tres años de gobierno socialista, se ha avanzado, “aunque queda mucho por hacer”, y agradece que la Diputación de León esté más receptiva, ya que desde esa institución si se han incrementado partidas económicas destinadas al Consejo, como la del Banco de Tierras o el SAM. Algo que no ocurre con la Junta, a pesar de que la relación con el presidente es “correcta”. 

“Con Mañueco soy muy crítico y él me lo ha recriminado en varias ocasiones, pero no tenemos un trato incorrecto. Con el resto de consejeros tengo un conocimiento limitado. La relación ha ido mejorando, pero es mera parafernalia, porque lo importante es tener un compromiso con la institución y no darle una palmadita en la espalda o invitarle a un café en la cafetería de las Cortes”, dice literalmente.

Expectativas de cara a las elecciones

En cuanto a las próximas elecciones autonómicas, Ramón espera que el PSOE mejore sus resultados y que el PP reciba un castigo “por todo lo ocurrido en los últimos años de gobierno”. En todo caso cree que también hay que tener en cuenta “el ascenso de la ultraderecha”.

Por último, lamenta todos los escándalos que su partido tiene a nivel nacional, que le ha hecho replantearse muchas cosas. Pero, aún así, cree que hay que seguir, “primero por respeto a toda la trayectoria del partido, por compromiso con la sociedad, y porque hay que evitar que la única alternativa posible llegue, porque eso sí que sería una catástrofe social”.