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Diez y UPL abanderan la lucha desde León para que se suprima el peaje del Huerna

Mientras en Oviedo más de 5.000 personas —entre partidos, sindicatos y empresarios— reclamaban la supresión del peaje de la autopista AP-66, en León solo el alcalde José Antonio Diez (PSOE), la UPL y algunos colectivos sociales han alzado la voz

La multitudinaria manifestación celebrada el viernes en Oviedo ha marcado un antes y un después en la batalla por eliminar el peaje del Huerna (AP-66), la principal vía de conexión entre Asturias y León. Más de 5.000 personas —según la Policía Nacional— se concentraron bajo el lema “Asturias unida, fin al peaje del Huerna” en una demostración inédita de unidad política, social y empresarial.

La movilización, que tuvo su replica 24 horas más tarde, fue impulsada por la Alianza por las Infraestructuras de Asturias, contó con la presencia del presidente del Principado, Adrián Barbón, representantes de todos los partidos políticos, sindicatos, cámaras de comercio y asociaciones. “Lo importante es mantener la unidad de la sociedad asturiana y de los partidos políticos, para evitar que la reclamación por el Huerna se convierta en un combate”, destacó Carlos Paniceres, presidente de la Cámara de Comercio de Oviedo.

El consenso fue total: “El interés general debe prevalecer; la justa reivindicación coge más fuerza con la multitudinaria manifestación ciudadana”, resumió Daniel González, de la Cámara de Comercio de Avilés.

León, sin respuesta institucional

El contraste con León no ha pasado desapercibido. Mientras Asturias ha llevado su reclamación a las calles y a las instituciones, en la provincia leonesa apenas se han escuchado voces políticas.

Solo el alcalde de León, José Antonio Diez (PSOE), ha reclamado con firmeza la supresión del peaje de la AP-66 y ha anunciado que el PSOE presentará una moción en el próximo pleno municipal para buscar un consenso institucional.

“El Gobierno debe cumplir ya las resoluciones que declaran irregular la ampliación de la concesión, que debería haberse extinguido hace cuatro años”, subrayó el regidor, que considera “injustificable” el mantenimiento del pago.
Diez recordó que el tráfico en la autopista “supera los cuatro millones de tránsitos anuales” y que “no es de recibo que los leoneses sigan sufriendo las consecuencias de decisiones arbitrarias e injustificables”.

UPL y colectivos sociales, las únicas voces al alza

Junto al alcalde socialista, la Unión del Pueblo Leonés (UPL) ha sido la otra fuerza política que se ha implicado activamente en la causa. Su secretario de organización, Roberto Aller, participó en la manifestación de Oviedo para mostrar “la histórica oposición leonesista a este peaje injusto”.

“Aller aprovechó el acto para trasladar al presidente Barbón y a la alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón, un mensaje claro: “Es necesario mandar un mensaje de unidad institucional a ambos lados del Huerna, a pesar de que nuestro Gobierno autonómico ni está, ni se le espera”.

A estas voces se suman colectivos ciudadanos y plataformas sociales leonesas, que llevan años denunciando el agravio comparativo que supone mantener el peaje más caro de Castilla y León mientras otras autopistas —como la AP-7, AP-2 o AP-68— han visto desaparecer sus cobros.

Silencio en la Diputación y el resto de partidos

Mientras tanto, la Diputación de León, así como el PP, Vox y Podemos, no han realizado pronunciamientos oficiales en León sobre la cuestión. El silencio institucional contrasta con la intensa movilización asturiana, que ya ha logrado colocar el asunto en la agenda política nacional.

Fuentes del PP leonés reconocen en privado que el debate “no interesa en este momento”, y en la Diputación prefieren “no abrir frentes con el Gobierno central”.

Sin embargo, la Comisión Europea mantiene abierto un expediente de infracción contra España por la ampliación irregular de la concesión del Huerna hasta 2050, lo que podría abrir la puerta a su anulación.

“Solo exigimos las mismas condiciones que el resto de los territorios”

El alcalde Diez fue tajante: “El Gobierno central debe eliminar ya este peaje, igual que ha hecho con otras concesiones. Solo exigimos las mismas condiciones de movilidad que el resto de los territorios.”

Mientras Asturias se organiza en torno a un movimiento de presión política y social sin precedentes, León parece quedarse rezagada en una reivindicación que afecta directamente a su conectividad, a su economía y a su futuro.

“No es de recibo que los leoneses tengan que esperar siempre”, concluyó Diez. “La conexión con Asturias no puede seguir siendo de pago; es una cuestión de justicia y de igualdad territorial”.