La huelga de médicos deja a León ante días críticos: consultas, pruebas e intervenciones podrán quedar suspendidas desde este martes
La huelga nacional de médicos que arranca este martes, 9 de diciembre, y se prolongará hasta el día 12, amenaza con provocar importantes retrasos y suspensiones en la atención sanitaria de León. El paro, convocado por la Confederación Española de Sindicatos Médicos (CESM), afectará a la actividad programada en los tres hospitales de la provincia y en los centros de salud, donde se prevé una “paralización” prácticamente total de todo lo que no sea urgente.
“La situación laboral exige una norma que plasme una mejora notable”, subraya el sindicato médico, que ha rechazado por unanimidad la última propuesta del Ministerio de Sanidad para reformar el Estatuto Marco. La convocatoria llega tras más de dos años de negociaciones “sin resultados” y coincide con la denuncia de jornadas semanales que, según los facultativos, pueden superar las 52 o 55 horas por la carga de guardias no reconocidas como actividad extraordinaria.
Qué ocurrirá con los pacientes leoneses: avisos y posibles suspensiones
El secretario general de CESM en Zamora, Tomás Toranzo, advierte de que la huelga afectará directamente a los ciudadanos. Las urgencias “funcionarán exactamente igual que un festivo o un domingo”, pero el resto de la actividad sanitaria —intervenciones programadas, consultas externas y pruebas diagnósticas— se verá suspendida salvo casos urgentes.
Toranzo asegura que la previsión es una “paralización total” de la actividad ordinaria también en León, en línea con lo ocurrido en convocatorias anteriores donde se alcanzó un seguimiento del 50% sin contar servicios mínimos.
El portavoz critica una “indefinición muy grande” respecto a cómo deben aplicarse los servicios mínimos, que esta vez serán más altos al coincidir dos fines de semana seguidos dentro del periodo de paro. Y lanza un mensaje claro: “En la última huelga no hubo nada, ninguna información para ellos, y muchos usuarios acudieron al hospital para marcharse sin ser atendidos”.
Por eso, CESM reclama a la Gerencia que refuerce los puntos de información y pide a los pacientes confirmar a primera hora si sus citas médicas se mantienen.
Las razones del conflicto: guardias y condiciones laborales
La protesta nacional surge del rechazo frontal a la propuesta del Ministerio de Sanidad para modificar el Estatuto Marco. Los médicos insisten en que el texto “no soluciona nada” y mantiene aspectos que consideran lesivos: Guardias que no cotizan a la Seguridad Social y no cuentan como tiempo trabajado, imposibilidad de que se consideren actividad extraordinaria ni se paguen por encima de la hora ordinaria, “Movilidad forzosa” y el “letal comodín de las necesidades del servicio”, que permiten aplicar condiciones “injustas” y un sistema de incompatibilidades que tachan de “discriminatorio”.
Falta de reconocimiento retributivo y profesional al no diferenciar entre titulados MECES III y MECES II, algo que, denuncian, ignora el criterio de responsabilidad.
El sindicato sostiene que Sanidad pretende “mantener las guardias como mecanismo para cubrir plantillas insuficientes” en un momento de fuga de profesionales.
Llamamiento a la participación… y disculpas a los pacientes
CESM anima a los facultativos de León a secundar los paros y acudir a las concentraciones previstas a nivel nacional. La movilización “da continuidad” a las huelgas de mayo y octubre, aunque entonces solo duraron un día.
A pesar de la contundencia de la protesta, el sindicato transmite un mensaje a los usuarios del sistema sanitario: “Pedimos disculpas por los trastornos que pueda ocasionar”, subraya Toranzo, que insiste en la importancia de que los pacientes se informen previamente antes de acudir a sus consultas o pruebas programadas.
Con la huelga a las puertas, León encara cuatro jornadas de inestabilidad asistencial en plena antesala navideña, pendientes de si el conflicto fuerza finalmente al Ministerio a retomar la negociación con los facultativos.
