El Obispado de León muestra su apoyo a los afectados por los incendios

La Diócesis de León ha emitido un comunicado en el que manifiesta su solidaridad con los pueblos afectados por la reciente oleada de incendios en la provincia y en el conjunto del país. “Queremos expresar nuestra preocupación y disponibilidad a la hora de ayudar a todas las personas damnificadas por esta catástrofe con un recuerdo orante por los fallecidos”, señala el texto.
Asimismo, el comunicado reconoce la labor de los equipos de extinción: “Es un signo de esperanza en medio de la desgracia y una llamada a la cooperación de todos por el bien común lejos de disputas estériles”.
Contacto directo con las parroquias y Cáritas
El obispo de León, Luis Ángel de las Heras, se ha mantenido en contacto con responsables de las parroquias de las zonas afectadas, interesándose “por la evolución, las consecuencias y las necesidades que pudieran ser necesarias en cada momento”.
Desde Cáritas Diocesana de León también se han establecido vínculos con ayuntamientos y párrocos para ofrecer colaboración y ayuda inmediata. La diócesis invita a particulares, asociaciones o parroquias que deseen colaborar a ponerse en contacto con Cáritas a través de su web o de la sede diocesana.
Llamada al cuidado de la creación
El comunicado incluye un llamamiento del área de Justicia, Paz e Integridad de la Creación de la diócesis, que anima a la ciudadanía a “tomar conciencia de la importancia del cuidado de nuestro entorno natural”.
En esta línea, se cita el mensaje del Papa para la X Jornada Mundial de Oración por el Cuidado de la Creación 2025, que recuerda que “es hora de pasar de las palabras a los hechos. Vivir la vocación de ser protectores de la obra de Dios es parte esencial de una existencia virtuosa”.
Para los creyentes, añade, “el cuidado de la creación se convierte en una cuestión de fe y de humanidad”.
Agradecimiento y esperanza
Finalmente, el Obispado agradece “las muestras de solidaridad que ya se han podido ver en nuestra diócesis” y anima a seguir trabajando y rezando “esperanzados por la extinción de estos incendios”.
El comunicado concluye con un mensaje de responsabilidad compartida: “Debemos ir adquiriendo un modo de vida que respete la creación que Dios nos ha regalado, para poder construir juntos un mundo y una sociedad en los que todos sus hijos e hijas podamos darle gracias libremente y vivir en la dignidad que él nos ha otorgado en su hijo Jesucristo”.