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León renueva su cita con la historia en Las Cabezadas

En esta edición, el síndico municipal será el concejal de Hacienda, Carmelo Alonso, mientras que el canónigo Juan Jesús Fernández Corral representará al Cabildo | La ciudad revive este domingo una tradición con más de 860 años de antigüedad en la Real Colegiata de San Isidoro
Las Cabezadas, una tradición que sigue viva más de ocho siglos después.
Las Cabezadas, una tradición que sigue viva más de ocho siglos después.

Este domingo, 28 de abril, León vuelve a celebrar Las Cabezadas, una de las tradiciones más antiguas y singulares de la ciudad, cuyo origen se remonta al año 1158, cuando una gran sequía llevó a los leoneses a sacar en procesión los restos de San Isidoro para pedir lluvia. El milagro llegó y desde entonces, cada último domingo de abril, el pueblo leonés honra ese gesto con una ceremonia que mezcla historia, fe y simbolismo.

Una ceremonia de debate y reverencias

Como cada año, representantes del Ayuntamiento y del Cabildo Isidoriano escenificarán el tradicional ‘Foro u Oferta’, en el que discuten si el acto es una ofrenda voluntaria del municipio o una obligación perpetua hacia el Cabildo. La ceremonia se celebra en el claustro de la Real Colegiata de San Isidoro, tras la llegada de la comitiva municipal a las 12:00 horas.

En esta edición, el síndico municipal será el concejal de Hacienda, Carmelo Alonso, mientras que el canónigo Juan Jesús Fernández Corral representará al Cabildo.

Un gesto que da nombre a la fiesta

El nombre de “Las Cabezadas” alude a las exageradas reverencias con las que se despiden los representantes del Cabildo y del Ayuntamiento al finalizar la misa que sigue al debate. Una coreografía ceremonial que se ha mantenido viva durante más de ocho siglos, reforzando la identidad histórica de León y su compromiso con las tradiciones.

León cumple con su legado

El acto comenzará a las 11:45 horas, cuando la Corporación Municipal, encabezada por el alcalde José Antonio Diez, parta desde el Ayuntamiento hacia San Isidoro. Allí tendrá lugar una de las celebraciones más representativas del calendario leonés, un evento donde la memoria histórica, el rito religioso y el civismo se entrelazan para mantener viva una costumbre única en el panorama cultural español.