Los pastores regresan (en foto) al Páramo

La sala de exposiciones Óscar García Prieto, situada en los bajos del Ayuntamiento de Santa María del Páramo, se ha convertido durante estas semanas en un espacio donde la memoria rural toma cuerpo en forma de fotografía. El pasado 22 de abril se inauguró allí la exposición “Mis Pastores”, una conmovedora muestra del periodista y fotógrafo leonés Juanda Rodríguez, que permanecerá abierta al público hasta el próximo 7 de mayo.
La colección, integrada por 66 fotografías de gran formato, retrata a pastores y pastoras de la provincia de León en escenas cotidianas, tomadas entre 1988 y 1993. Imágenes en blanco y negro y a color que recogen no solo rostros, sino también gestos, paisajes y silencios. Todo ello conforma un homenaje visual a una profesión ancestral en declive, la del pastor trashumante, figura esencial del paisaje y la cultura leonesa.
Un acto con raíces, música y emoción
La inauguración contó con la presencia del concejal de Cultura, Omar Sabaria, y una destacada asistencia de público. El propio autor, vestido con traje tradicional pastoril, ofreció una emotiva presentación de la muestra, en la que compartió anécdotas, contexto y reflexiones sobre la experiencia de capturar estos retratos hace ya más de 30 años.
La velada fue aún más especial gracias a la participación de los hermanos Medina, hijos del desaparecido Gratiniano, uno de los protagonistas de las imágenes. Acompañaron las palabras con música de rabel y cantos tradicionales, generando un ambiente íntimo y cargado de significado.
Una exposición nómada como los pastores que retrata
La muestra no es estática, al igual que sus protagonistas. “Mis Pastores” ha ido recorriendo el mapa leonés desde su primera exposición, con paradas en Sahagún, Salamón, Santa María del Río y Calzadilla de los Hermanillos, y también ha cruzado provincia hasta llegar a Cuéllar (Segovia). Tras su paso por Santa María del Páramo, ya tiene previsto continuar su andadura en Villanófar, Velilla de la Reina y Los Barrios de Luna.
La intención del autor y de los organizadores es clara: seguir llevando esta muestra a nuevas localidades, invitando a redescubrir y valorar una forma de vida que, aunque cada vez más rara, forma parte fundamental de la identidad rural y del patrimonio inmaterial leonés.
La exposición puede visitarse: