Crimen en Nochebuena en León: "Sangre por todas partes" y los "trompazos" a la madre del acusado
Los primeros agentes que llegaron al inmueble del barrio leonés de San Esteban tras el aviso en la noche del 24 de diciembre de 2022 relataron este miércoles ante el jurado popular una escena “dantesca”. “Cuando entramos a la cocina estaba todo lleno de sangre y de polvo. Nos ordenaron no tocar nada hasta que llegaran los científicos”, explicó uno de los policías.
Según su testimonio, la víctima —su propia madre— yacía en el suelo con “huellas de pisadas en dirección a la salida y un cuenco junto a la cabeza”. El agente que practicó el arresto de Alan Rubén T.S., hijo de la fallecida, recordó que “salió en calzoncillos cuando fuimos a detenerlo. Nos pidió permiso para vestirse antes de acompañarnos y se lo dimos, por supuesto. Estaba tranquilo y normal, no parecía drogado”.
Los informes periciales señalan que el joven, de entonces 26 años, presenta una discapacidad reconocida del 49% y antecedentes de consumo de drogas. La acusación le imputa un delito de asesinato con agravante de parentesco y solicita 24 años de prisión, mientras la defensa pide la absolución o una rebaja de condena por alteración psíquica y drogadicción.
“Escuché gritos y golpes muy fuertes”
La principal testigo del caso, vecina de la víctima, situó los hechos entre las 21:00 y las 23:15 horas de aquella Nochebuena. “Llamó primero a las nueve, pero su madre no le abrió. A las once y cuarto volvió y le abrí yo. Tuvieron una discusión muy gorda, pensé que me echaban el techo abajo”, relató ante el tribunal.
Según su declaración, tras abrirle la puerta al acusado se escucharon “unos trompazos tremendos” y, al día siguiente, “todo estaba lleno de sangre” en la escalera. La mujer afirmó que el enfrentamiento se produjo “en la cocina” y que ambos estaban bajo los efectos de las drogas.
Durante el interrogatorio, la testigo rectificó algunos puntos de sus declaraciones anteriores y precisó que no vio el momento del crimen, pero sí las marcas de sangre en la pared del rellano. “Me mandaron no limpiar nada”, indicó.
Un juicio marcado por las contradicciones
El proceso, que se celebra en la Audiencia Provincial de León con jurado popular, avanza entre testimonios cruzados y detalles de una relación familiar marcada por los conflictos y la adicción. El magistrado presidente intervino para aclarar varias contradicciones en las declaraciones de la vecina, quien finalmente admitió que no oyó al acusado pedir dinero a su madre, aunque lo supo “después”.
Mientras tanto, la acusación sostiene que Alan Rubén actuó con intención de matar, atacando a su madre con un arma blanca tras una discusión, mientras la defensa insiste en que su estado mental y su dependencia de las drogas reducen su responsabilidad penal.
La vista continuará en los próximos días con la declaración de los peritos forenses y los informes finales de las partes antes de que el jurado emita su veredicto.