'Anora' gana el Oscar a mejor película elevando el cine ‘indie’ a la cima de la industria

“Anora” ha costado solo 6 millones de dólares. Es la segunda película más barata de las 10 finalistas, solo por encima de la brasileña “Aún estoy aquí” que ha costado 1,4 millones de dólares. Lleva recaudados en taquilla más de 36 millones desde que se estrenó en las salas de EE.UU en octubre, y en enero en el resto del mundo, una rentabilidad que también es un premio incuestionable. De aquí en adelante su repercusión mundial se inflará exponencialmente por el triunfo alcanzado y su recaudación aumentará considerablemente.
La película se presentó mundialmente el pasado mes de mayo en el Festival de cine de Cannes. Se presentó y ganó la Palma de Oro. Este premio es el más importante del circuito de festivales, al que ya suma los honores especiales que “Anora” ha conseguido esta madrugada en el Dolby Theatre de Los Ángeles, y añade también el mérito de que una misma película gane ambos galardones. Es la tercera ocasión que esto sucede en los 77 años de confluencia de ambos eventos.
Sean Baker puede sentirse orgulloso por todos estos logros, por su independencia respecto a la industria y también por la calidad palpable de su película. Una historia que se mueve en el terreno del cuento de hadas, del sueño americano, pero siempre desde la parte oscura, desde los perdedores, desde los callejones sórdidos de la mafia, la prostitución y los matones. Baker envuelve esa oscuridad con algunas dosis de humor y un barniz humano y romántico que aporta a la película una mezcla muy especial, el conjunto recuerda por momentos al cine macarra y violento de Guy Ritchie y al Scorsese tierno de “Jo que noche”. Sin duda, todos son buenos ingredientes para sentarse a verla en una butaca de cine cuanto antes.
La mayor sorpresa
Si las predicciones sobre los premios otorgados por académicos o por jurados, en esta u otras industrias suelen resultar vanas e inciertas casi siempre, en esta edición de los Oscar lo eran más. Quizá, la mayor sorpresa de la noche recayó en el Oscar a la mejor actriz para Mikey Madison, protagonista de 'Anora', no por injusto, puesto que su interpretación es maravillosa, sino por ganar a la que parecía la gran favorita, Demi Moore por la controvertida cinta “La sustancia”. En el resto de las categorías se han repartido los premios con cierto equilibrio.
Uno de los galardones que parecía seguro y que finalmente se confirmó, fue el Oscar a mejor actor (segundo de su carrera) para Adrien Brody, protagonista de “The Brutalist”. Una película monumental que supone un golpe en la mesa, un homenaje al cine clásico, incluso académico, que propone el ejercicio y el placer de acudir a una sala de cine para disfrutarla. A pesar de algún resbalón innecesario en el guion y un punto de pretenciosidad, no deja de ser una película extraordinaria. Finalmente obtuvo 3 Oscar, el ya mencionado de Brody, a la mejor fotografía para Lol Crawley y a la mejor música original para Daniel Blum. Los indudables méritos de su director, Brady Corbet, que también eran dignos de Oscar, no se vieron recompensados.
'VistaVisión'
Ni por su atrevimiento al rodar en ‘VistaVision’ —un formato de celuloide de 70 mm. que destaca por su nivel de detalle y su grano especial — ni por manejar una epopeya de 215 minutos con un presupuesto de solo 10 millones de dólares, algo increíble.
En el Oscar para las categorías de actor y actriz de reparto no hubo sorpresas. Zoe Saldaña ganó por “Emilia Pérez”, un papel que merecía la nominación en la categoría de actriz principal, pero a la que la injusticia inicial le ha resultado finalmente provechosa por el premio. Y Kieran Culkin ganó por su trabajo en “A Real Plain”, aquí podrían haber otorgado perfectamente un Oscar ex-aequo a Yuriy Borisov por “Anora”, su trabajo es también magnífico.
El Oscar a la mejor película internacional fue para “Aún estoy aquí” el drama brasileño sobre la dictadura dirigido por Walter Salles. En esta categoría la favorita fue durante mucho tiempo “Emilia Pérez”, incluso lo fue para la categoría de mejor película, pero después de la controvertida polémica protagonizada por Karla Sofía Gascón y sus tweets, queda claro el perjuicio revertido sobre las votaciones de los académicos. De 13 nominaciones se ha dejado sospechosamente 11 Oscar por el camino, ha ganado el de Saldaña y el de mejor canción original. Es uno de los peores saldos en balance nominaciones-premios de la historia. El nombre de Karla Sofía solo sonó al principio de una gala dinámica y muy musical. Fue el presentador Conan O´brien, quien se refirió a ella con un chiste o guiño bienintencionado, y eso fue todo a lo largo de la ceremonia, ni Zoe Saldaña le hizo una mínima referencia en su discurso de ganadora. La penitencia está siendo dura para ella y para la película, ni alfombra roja le concedieron. Esto es Hollywood.