Garamendi cree que la reducción de la jornada laboral costará 23.000 millones
El presidente de CEOE reclama al Gobierno estabilidad política y seguridad jurídica y no “circos” como el de Aldama y Leire Díez
El presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Antonio Garamendi, recalcó este jueves en Valladolid que la reducción de la jornada laboral es una medida “malísima” para España, a la vez que cifró el coste de su aplicación en 23.000 millones de euros. Además, y aunque no quiso pronunciarse sobre la necesidad de un adelanto electoral, si reclamó al Gobierno estabilidad política y no “circos como el que vimos ayer”.
Garamendi, que está mañana asistió a la gala de entrega de premios de CEOE Valladolid, aseguró que los principales paganos de la medida serán las pequeñas empresas, especialmente el comercio y la hostelería y lamentó que el Gobierno y su vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, se haya empeñado en no negociar y prefiera aplicar una ley sin diálogo previo.
En este sentido, indicó que desde la CEOE se está trasladando a los distintos grupos políticos cuál son “nuestras opiniones y clamor de los autónomos y de los pequeños empresarios, que son el gran ecosistema de la economía del país”.
"Profunda tristeza" por el enfrentamiento político
Además, preguntado por la actualidad política y por el enfrentamiento entre el acusado de ser el comisionista de la trama Koldo, Víctor de Aldama, y la presunta ‘fontanera’ del PSOE, Leire Díez, Garamendi reconoció que le produce “profunda tristeza” y aseguró que las personas que están detrás debería estar avergonzadas, ya que la sociedad española no se merece este espectáculo.
En sentido, aseguró que en la vida política hay otra forma de actuar y reclamó respeto para las instituciones y trasladó el apoyo de la clase empresarial a jueces y a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado. “En democracia es necesaria la separación de poderes y ver estas cosas no es nada edificante. Cualquier ciudadano lo que esta deseando es una vuelta a la normalidad, al diálogo, a los pactos de Estado”, afirmó.
Sobre un posible adelanto electoral, Garamendi no quiso pronunciarse, pero si reclamó al Gobierno estabilidad política y seguridad jurídica, algo básico para los empresarios, y no “circos como el que vimos ayer”.